El avión de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) accidentado este domingo en Veracruz, estaba valuado en 5.8 millones de dólares, o 116 millones de pesos, y era el único Learjet en la flota de 370 aeronaves de la Secretaría de la Defensa Nacional.
La empresa Seguros Atlas tendrá que responder por el siniestro del Learjet 45XR, con matrícula 3912, en el que murieron seis militares.
El seguro también prevé un beneficio de 350 mil dólares por cada fallecido, o 2.1 millones de dólares en total.
Sedena tendrá que pagar un deducible de 174 mil dólares, 3.5 millones de pesos, pero el proceso de ajuste de la aseguradora para resolver si pagará por el Learjet puede tomar varios meses.
Desde agosto de 2020, Atlas ganó el contrato de un año de seguro de la flota de Sedena, por una prima de 39.9 millones de dólares más IVA, mismo que incluye la cobertura del avión presidencial Boeing B787-8 y otros cuatro jets ejecutivos, que el gobierno ha intentado vender desde 2019.
El seguro de la flota aérea ha sido problemático para Sedena. En la licitación de 2018, varias empresas advirtieron que la póliza podía volverse incosteable si no reducía la siniestralidad, especialmente de helicópteros.
Entre agosto de 2016 y febrero de 2018, la FAM reportó treinta siniestros que habían obligado a generar reservas para pago de seguro por 96 millones de dólares, entre ellos diez por fallas al aterrizar, cinco por agresión con arma de fuego, y la pérdida total de un helicóptero Black Hawk de tres millones de dólares, volteado por el viento cuando estaba en tierra.
En 2018, Sedena informó a las aseguradoras que tuvo que cesar a finales de 2017 las operaciones de su flota de casi cien helicópteros, realizar un Congreso de Seguridad Aérea, y sacar del retiro al General de División Misael Orrostieta, piloto de los Presidentes durante cinco sexenios, para impartir pláticas al personal.
“Se suspendieron temporalmente las operaciones de toda la flota de helicópteros, para llevar a cabo pláticas de concientización de la importancia de operar de acuerdo a las normas, para evitar accidentes”, informó.
Detalló que el Teniente Coronel retirado Gabriel Rivera Delgadillo, que tiene una empresa privada, estaba diseñando un Sistema de Gestión de Seguridad Operacional, con reglas de la Organización Internacional de Aviación Civil (OIAC).
La FAM agregó, en el concurso de 2018, que ordenó a sus mandos territoriales dejar a los pilotos decidir si procede o no emprender un vuelo con pasajeros, pero rechazó aclarar muchas otras dudas de las aseguradoras alegando “seguridad nacional”
Con información de Reforma