ColumnaSinNombre | LAS ARMAS “PERDIDAS”

Notiver Speshial Edishion
@pablojair

Este martes había trascendido que a policías ministeriales les habían robado sus armas largas porque le dieron un “cristalazo” a su camioneta asignada, cuando la dejaron estacionada sobre la avenida Lázaro Cárdenas, de la colonia Rafael Lucio, en Xalapa, a la altura de la tienda departamental Elektra, pero finalmente ya se filtró un video donde se aprecia que la versión de los agentes es falsa.

De entrada, nunca hubo tal “cristalazo”.

En segunda, por reglamento, no pueden dejar sus armamentos solos o a la vista en una unidad oficial, lo que ya de por sí era raro. Extrañamente, los agentes dejan estacionada la camioneta con sus armas al interior y se van como si nada.

Luego se supo que no estaban estacionados ahí donde decían, sino en una calle donde se sitúan varias bodegas y hay poco tránsito, de nombre Joaquín Ramírez Cabañas. De dicha unidad descienden dos agentes, sin portar las armas de cargo.

Minutos después de que ambos agentes desaparecen de la escena, se ve a una persona corpulenta vestida de azul y gorra blanca acercándose a pie para asomarse al interior de la unidad oficial.

Pasan unos minutos y un vehículo blanco se estaciona justo frente a la camioneta de los ministeriales y se ve descender a la misma persona corpulenta vestida de azul.

Esta persona se acerca a la puerta del piloto y usa un dispositivo que aparentemente se trata de una “ventosa”: un artilugio que cubre el llavín, echa aire a presión, alinea los pernos y bota los seguros.

No tarda mucho en abrir la unidad y saca del interior una mochila con presuntas municiones. Esta la lleva al vehículo blanco y regresa a la camioneta por segunda vez para sacar una arma larga, de acuerdo a lo que se aprecia en video. Muy educadamente cierra las puertas de la camioneta y regresa a su vehículo. Arranca, da la vuelta y se va.

Por lo que se ve, la persona sabe agarrar el arma larga y no tiene empacho en caminar cerca de 12 pasos desde la camioneta al otro vehículo para guardarla, a plena vista, caminando tranquilamente.

La acción durará unos 20 minutos, y pues la versión de armas robadas parece que no cuaja porque irresponsablemente dejaron ahí esa camioneta con armas a la vista, para que “casualmente” apareciera un vehículo con un tipo que se lleva el armamento como si nada.

La otra es: o el vato que les robó estaba muy loco o de plano era muy temerario. O las dos cosas.

Eso sí, por la tarde, en la colonia Lomas de San Roque montaron un fuerte operativo de ministeriales aparentemente buscando las armas perdidas.

Vaya escándalo.