José Ortiz Medina
“Hermano, se nos cayó”, solía decir Fidel Herrera cuando le hablaba a un personaje al que se le había “caído” una candidatura.
Era la forma en que Tío Fide intentaba hacer creer que se la había “jugado” con el aspirante a un cargo de elección popular, pero por “causas ajenas”, el proyecto político no había cuajado.
Esto viene a cuento por la fallida candidatura de Félix Salgado Macedonio para la gubernatura de Guerrero.
Y es que cobra fuerza la hipótesis de que finalmente a Félix lo dejaron morir políticamente. AMLO le hizo creer que lo defendía, pero a final de cuentas lo dejaron solo.
Fue lógica la jugada: Salgado Macedonio ya era insostenible luego de las denuncias en su contra por presuntas violaciones y abusos sexuales.
Las protestas en Guerrero ya habían subido de tono. Los actos vandálicos de las “feministas” iban en aumento. El costo político para Morena hubiera sido catastrófico en esa entidad federativa, y en el resto del país el daño colateral se iba a traducir en menos votos para la 4T.
Félix Salgado Macedonio ya se dio cuenta de esta estratagema. Por eso es que hace unos días culpó a su partido, Morena, de no haber presentado el informe de gastos de precampaña y que por esa omisión resultó afectado con la cancelación de su candidatura al gobierno de Guerrero.
En la impugnación que envió al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Salgado Macedonio señaló que son los partidos quienes deben notificar a sus candidatos la obligación de entregar su informe de ingresos y gastos de precampaña.
Pero, señala, Morena nunca lo requirió, por lo que “resulta ilegal y desproporcionado que la consecuencia sea la pérdida del derecho a ser registrado como candidato”.
“Queda evidenciado que Morena no dio la oportunidad de que el suscrito pudiera presentar el informe, además de que reconoce que no propició las condiciones al suscrito para poder rendirlo, lo que deja patente que la responsabilidad es única y exclusivamente de dicho instituto político”, señala el aspirante en la impugnación.
Al hacer una relatoría de los hechos, Salgado Macedonio señala que el 9 de enero presentó un informe ante Morena, en su carácter de “aspirante” porque, reitera, no fue precandidato.
“Mi obligación como aspirante a la candidatura, quedó satisfecha con la entrega del informe respectivo ante el partido, y que en consecuencia, la responsabilidad de entrega recae justamente en el partido Morena”, expone.
Según Macedonio, el 22 de marzo, Morena presentó el informe de gastos al INE, días antes de que el Consejo General sesionara para discutir la sanción por no reportar sus gastos de precampaña.
Entonces vuelve a responsabilizar al partido de la falla en la entrega: “En el momento en que yo lo entregué al partido la responsabilidad de hacerlo llegar al Instituto Nacional Electoral fue del partido político Morena, pues el suscrito nunca tuvo acceso al sistema de fiscalización.
También culpa al INE pues señala que ni el instituto ni su Unidad de Fiscalización lo requirieron para cumplir con la obligación de presentar su informe de gastos.
Acusó que para el INE es más importante el que no se presentó el informe que la cantidad que no reportó como gastos de precampaña y que asciende a 19 mil 874.48 pesos.
Esta es una cantidad “ínfima” respecto al tope de gastos de campaña aprobado por el organismo electoral de Guerrero que fue de 5 millones 422 mil 678.79 pesos para la precampaña, añade Salgado Macedonio.
Asegura que con los más de 19 mil pesos era “imposible obtener un posicionamiento indebido ante el electorado en perjuicio de otras fuerzas políticas o contendientes”.
Por eso es que ahora Salgado Macedonio no se traga el rollo de que todo fue culpa del INE. Sus sospechas las enfoca ahora a Palacio Nacional, en donde, de manera magistral, lo sacrificaron.
Sólo falta que AMLO le llame y le diga: “¡hermano, se nos cayó”.
RECORTES: A ver, nos comentó Naldy Rodríguez que ella se inconformó por la controversia constitucional que sus compañeros comisionados decidieron interponer ante la SCJN, y por la cual le dieron “palo” al IVAI al declararla improcedente. Pero con esta “precisión”, Naldy revela sin querer lo que ya sospechábamos: que en dicho organismo están divididos en los asuntos relevantes y que ella como comisionada presidenta tiene la misma fuerza que una botella de agua mineral destapada desde hace días. O sea, que en el IVAI, son dos contra una, y Naldy, en este embrollo, sería la rival más débil… CON LA DESIGNACIÓN de Julen Rementería en la Coordinación del PAN en el Senado cobra fuerza la versión de que finalmente el papá aceptó la negociación de que su hijo Bingen declinara y le dejara el camino libre a ChiquiYunes. Por eso, hasta se desistieron en el tema del poco claro domicilio del candidato perdedor a la gubernatura. Entonces, para qué tanto brinco… para eso nos gustaban.
