El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, presumió la apreciación de la divisa mexicana durante su administración, “No sólo no ha habido devaluación, sino que se ha apreciado el peso”.
Sin embargo, los factores que han fortalecido a la divisa han sido más de carácter externo como la fuerza del comercio de Estados Unidos con México, que depende más del crecimiento de ese país que de lo que pueda lograr la autoridad local.
Además, la moneda azteca recibe fuerza del crecimiento económico estadounidense y su mercado laboral que resulta en un gran volumen de remesas de connacionales a México, que son de los principales factores del fortalecimiento del peso frente al dólar.
Durante el mandato de la cuarta transformación, calificadoras han degradado las notas crediticias, como son el caso de Moody’s, Fitch Ratings y S&P Global, y han manifestado preocupaciones sobre una débil gobernanza.
