Mató a su marido con agua hirviendo por abusar de sus hijos y es condenada a cadena perpetua

Gran Bretaña fue el escenario en el que se desarrolló un confrontamiento familiar en el que una mujer mató a su marido luego de que éste abusara de sus hijos.

Los jóvenes, víctimas de este agresor, contaron a su madre que el hombre los había tocado de forma indebida y por ello Corinna Smith, de 59 años de edad, decidió matarlo usando agua hirviendo.

Pese al abuso infantil, el juicio del crimen ocurrido hace un año dictaminó que Smith deberá cubrir cadena perpetua, estipulando el 28 de junio que Michael Bines, de 80 años, había sido asesinado de forma premeditada.

Cuando este dormía, Corinna colocó tres bolsas de azúcar en agua hirviendo y, con la mezcla de caramelo, se dirigió a su habitación para cubrirlo con ella y quemarlo.

Las heridas le provocaron a Baines una muerte tras pasar cinco días internado en el hospital local. El líquido que se quedó incrustado en su piel le causó un daño mayor.

Antes de la condena final se estipuló que Smith cumpliría un mínimo de 12 años en la cárcel previos a su libertad condicional dado que no había más denuncias en contra de Baines.