Bernabé Vallejo Olvera
Como fuera informado oportunamente en este medio de comunicación, sobre el macabro descubrimiento de dos cuerpos sin vida y con claras huellas de tortura en la localidad de Paso de Chicoaloque, perteneciente al municipio de Coyutla –enclavado en la Sierra Totonaca– en recientes horas se logró la identificación de los cadáveres.
Las investigaciones correspondientes señalaron que los cuerpos fueron identificados como MANUELA J.G, de 36 años de edad, junto con su hijo KEVIN ANTONIO J.H, de 18 años de edad, quienes viajaban a bordo de un autobús de retorno acompañados de otros dos menores de edad.
Ambos habían sido privados de su libertad al regresar de la CDMX para asistir a un funeral, cuando fueron interceptados por varios ocupantes quienes viajaban a bordo de un automóvil quienes bajaron tanto a MANUELA N como KEVIN N, mientras a los otros dos menores los dejaron a cargo del chófer en las inmediaciones de Lindero, comunidad en el estado de Puebla.
Después de haber sido privadas de su libertad, ambas personas fueron encontradas sin vida y en completo estado de descomposición además de presentar claras huellas de tortura.