Ante la posible salida de Aeromar del mercado de la aviación mexicana, el presidente Andrés Manuel López Obrador planteó que los trabajadores y algunos inversionistas puedan capitalizar a la línea aérea y formar una cooperativa mixta donde intervengan ambos.
Este mismo esquema, expuso el presidente de la República, podría darse en la extinta Mexicana de Aviación e Interjet, que actualmente se encuentra en huelga y con múltiples requerimientos por insolvencia en el pago de sus obligaciones.
“Se puede hacer una cooperativa, algo mixto entre inversionistas particulares y trabajadores, esto en el caso de Aeromar pero también para el caso de las otras dos líneas, que al final era la misma, la antigua Mexicana, que se pudiera crear otra línea”, comentó López Obrador.
Al respecto, López Obrador dijo que en caso de concretarse algún tipo de inversión particular y de los trabajadores, su gobierno buscaría facilitar el cumplimiento de las obligaciones de Aeromar con autoridades tributarias y con la administración del aeropuerto internacional de la Ciudad de México.
“Yo les comentaba que si buscaban empresarios y que hablaran con los dueños de Aeromar, los señores Katz, y que se lograra que los trabajadores participaran, pilotos, trabajadores administrativos, todos, como socios, que nosotros ayudaríamos, buscaríamos la forma de ayudar, por ejemplo en hacer calendarios de pago de la deuda que les permitieran salir adelante, siempre y cuando estén los trabajadores”, comentó el mandatario federal en conferencia de prensa desde Palacio Nacional.
Hoy, Forbes México reveló que los apoderados legales del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), solicitaron el embargo de bienes, marcas y caja de Transportes Aeromar por un adeudo de 107 millones 877 mil pesos de la Tarifa de Uso de Aeropuerto (TUA).
Transportes Aeromar adeuda 64 facturas de recolección de la Tarifa de Uso de Aeropuerto del 7 de octubre de 20018 al 6 de junio de 2019, dice la demanda presentada por los apoderados legales del AICM ante el juzgado Décimo de Distrito en Materia Civil en la Ciudad de México.
“Hay personas interesadas y ojalá que se promueva esto, que sepan que nosotros estamos dispuestos a ayudar para que no se cierren estas líneas y que se puedan mantener”, sostuvo el Ejecutivo federal.
Queremos que Aeromar sea la línea del Bienestar: ASPA
José Humberto Gual Ángeles, secretario general de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA), pidió al presidente Andrés Manuel López Obrador que intervenga para que los inversionistas y funcionarios del SAT, el IMSS y el Infonavit reestructuren Aeromar y la conviertan en la línea del Bienestar.
“Nosotros estamos convencidos que en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, que arranca el 21 de marzo del próximo año, su primer aterrizaje debe ser un avión de Aeromar, la línea del bienestar, y le dé justicia a todos esos extrabajadores de Mexicana e Interjet”, dice el líder sindical.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador quiere arrancar de la mano con un inversionista una nueva aerolínea en México: “Pues si pretende hacer eso, nosotros le damos el vehículo para hacerlo” a través de Aeromar, declaró a Forbes México.
La creación de una línea aérea como lo planea el gobierno de Andrés Manuel López Obrador es demasiado complejo: “Imagínate, tienes que traer el avión, tienes que capacitar pilotos y eso es un gasto muy grande”, manifiestó el piloto aviador.
Hoy Aeromar tiene aviones, pilotos, trabajadores, estructura y tiene el nombre que gusta: “Aeromar, la línea del Bienestar”, señaló el representante de ASPA.
José Humberto Gual Ángeles comentó que los aviones de Aeromar son los únicos capaces de conectar la economía social generada con los proyectos de infraestructura y de bienestar trazados por López Obrador, como el Istmo de Tehuantepec, la Ruta Maya y la Huasteca Potosina.
Con Aeromar, la línea del Bienestar: “Matamos 25 pájaros de un tiro, le damos viabilidad a una empresa, así como le damos justicia a Mexicana a Interjet, detonamos el sector aéreo y hacemos economía social en donde se tiene que hacer”, afirmó secretario general de ASPA.
En el pasado se crearon aerolíneas y desestabilizaron el mercado y de todo lo demás: “¿Qué pasa con esas aerolíneas en un futuro? Quiebran y ya desestabilizan toda la aviación nacional dándole oportunidad únicamente a aerolíneas extranjeras y perder participación mexicana en el mercado. De 2010 para acá aproximadamente 12 aerolíneas han quebrado y no nos podemos dar el lujo de que esto vuelva a suceder”, consideró.
El representante de los pilotos aseveró que son los primeros interesados en conservar su fuente de trabajo, luego de que la pandemia de Covid-19 afectó a la industria aérea en México y el mundo.
Una muestra para mantener a flote la aerolínea Aeromar fue que “nosotros firmamos un convenio hace algún tiempo para reducir comisiones salariales durante la pandemia de Covid-19, hemos hecho lo que nos corresponde como trabajadores”.
“Nos hemos apretado el cinturón todos y lo único que pedimos un poquito es la sensibilidad, buscamos como te repito nuestra aerolínea se convierta en Aeromar, la línea del bienestar”, agregó el secretario general de ASPA.
—¿Aeromar, la línea del Bienestar es para que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador no cree nueva aerolínea?
— Por supuesto, le diste al clavo completamente. El gobierno de Andrés Manuel López Obrador está interesado en crear una nueva aerolínea rescatando lo que queda de Mexicana de Aviación. Nosotros sabemos de aviación, llevamos muchos años metidos en este negocio, hay quienes nacimos y crecimos en los aviones. El gobierno de Andrés Manuel López Obrador hizo una apuesta a la industria aérea con la construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles y el Aeropuerto Internacional de Tulum, le está apostando a unir el Istmo de Tehuantepec, a la Huasteca Potosina y en el Plan Nacional de Desarrollo dice que se le debe hacer justicia a los trabajadores de Mexicana de Aviación. ASPA de México levanta la mano y le dice al gobierno aquí estamos: nosotros compartimos la idea de hacer justicia a los pilotos de Mexicana de Aviación, a los compañeros de Interjet y a la aviación nacional.
— ¿Los afiliados de ASPA, como trabajadores, estarían dispuestos a comprar Aeromar?
— Somos trabajadores y no tenemos todavía un esquema de inversionistas y no vamos a confundir los roles. Si en un momento dado nosotros podemos aportar más allá como lo estamos haciendo actualmente, lo seguiremos haciendo. Hemos aportado más de 50 millones de pesos para que nuestra empresa continúe y eso nos convierte en cierto modo en inversionistas.
—¿ASPA pide un rescate, una ayuda o un financiamiento al gobierno de Andrés Manuel López Obrador para darle viabilidad a Aeromar?
—Nosotros no estamos pidiendo un rescate, ya que no va ni con nosotros ni va con los tiempos actuales de México. Estamos pidiendo una intervención del gobierno para que sensibilice a los inversionistas y a través de convenios con el SAT, con Hacienda, con el IMSS y con el Infonavit nos den el tiempo de reestructurar esta empresa y darle la viabilidad hacia adelante.
—¿ASPA le plantea al presidente que se convertirán en cooperativistas de Aeromar, la línea del Bienestar?
— No. No es una cooperativa, sino nosotros lo que buscamos es la viabilidad y la continuidad de la operación de la aerolínea. Sé que el tema de la cooperativa se trató de crear a través de Mexicana.
—¿La apuesta de ASPA es vital en estos momentos donde empresas como Aeromar y quizás otras aerolíneas sufren por los efectos de la pandemia de Covid-19?
— Por supuesto, todas las aerolíneas están sufriendo. ASPA de México no sólo ve por nosotros, sino es un sindicato formado por seres humanos con mucho corazón, con muchos sentimientos que vemos por la industria, los sobrecargos, los trabajadores de tierra, los mecánicos y los controladores. Queremos, amamos la aviación.
—¿Y ya le presentaron al presidente de la República y al secretario de Comunicaciones y Transporte su idea de la Aeromar, la línea del Bienestar?
— Hemos tenido contacto con el gobierno federal, quien se ha portado sumamente abierto. Cuando Mexicana cesó operaciones en agosto del 2010, el nivel de funcionario público con el que tratábamos llegaba a la subsecretaría del Trabajo.