José Ortiz Medina
El diputado local Juan Javier Gómez Cazarín se ha convertido en uno de los actores legislativos más importantes y uno de los nuevos rostros de la política en Veracruz.
Gómez Cazarín ha pieza clave no sólo en los resultados que el Congreso local le dio a la Cuarta Transformación, sino también en la unión de la base de Morena.
El nacido en Hueyapan de Ocampo, se convirtió en el primer diputado de Morena en ganar el distrito de San Andrés, con un abrumador respaldo de la ciudadanía; llegó a la Legislatura local para hacerse de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) con el respaldo de la mayoría de los grupos legislativos, y pronto, mostró su gran oficio político para impulsar los acuerdos en beneficio de Veracruz.
El primer año del Congreso con mayoría de Morena no fue fácil: los desencuentros principalmente con los legisladores del PAN implicaron que Juan Javier Gómez Cazarín se empleara a fondo para conciliar y convencer en aras de la transformación que se requería para Veracruz, tras los desastrosos gobiernos de Javier Duarte de Ochoa y Miguel Ángel Yunes.
La renegociación de la deuda pública estatal, la destitución del fiscal General Jorge Winckler y Marcos Even Torres, fiscal Anticorrupción, generó fuertes fricciones entre el PAN y Morena, incluso, se llegó hasta los recursos de inconstitucionalidad que con el paso del tiempo fueron desechados, gracias a que Gómez Cazarín tejió fino.
Se nombró a la primera fiscal General del Estado, cambio que permitió recomponer a este órgano autónomo, copado por una red de impunidad y corrupción entre funcionarios públicos y grupos delictivos; paulatinamente se han erradicado estos males haciendo más eficiente a la dependencia, recuperando su papel de defensora del pueblo, no de los delincuentes.
La renovación del Poder Judicial fue tersa y también por primera vez, se dieron más nombramientos a mujeres que a hombres, a fin de equilibrar la equidad de género en esta instancia; igual sucedió en otros organismos autónomos.
La mitad del sexenio de Cuitláhuac García transcurrió de manera tersa gracias al gran trabajo realizado por Gómez Cazarín, lo cual permitió sentar las bases del proyecto de la Cuarta Transformación a favor de los más necesitados y para establecer un cambio radical en la forma de ejercer el Gobierno.
En tres años, Juan Javier Gómez Cazarín se convirtió en el hombre de confianza del gobernador Cuitláhuac García Jiménez y en quien se apoya para emprender las reformas necesarias para enderezar el camino de Veracruz. Por ello, Gómez Cazarín se ganó su derecho a continuar como legislador y presidente de la Jucopo por el tiempo que dure la LXVI Legislatura local.
Más allá de su quehacer legislativo, Juan Javier Gómez Cazarín se ha convertido en referente de Morena a lo largo y ancho del estado de Veracruz, recorriendo la mayoría de los municipios para respaldar a las candidatas y candidatos que contendieron por las diputaciones federales y locales así como por las presidencias municipales.
Su carisma, solidaridad, humildad y capacidad política lo han posicionado en la palestra política rumbo al 2024, sin duda será un gran activo para Morena en la trinchera en la que se le ponga, ya sea como candidato a un cargo de elección popular o respaldando a quien la base designe para contender por la gubernatura, las senadurías, diputaciones federales y locales.
En el proyecto para mantener la Presidencia de la República, Juan Javier Gómez Cazarín también habrá de jugar un papel preponderante, pues ha demostrado que puede convocar a la militancia y a los actores políticos de las diferentes corrientes internas de Morena para trabajar en un mismo objetivo.
TITO DELFÍN, UN LACAYO DE LOS YUNES
Campaña familiar fue la que se llevó a cabo en Boca del Río con el candidato a la Dirigencia Estatal del PAN, Tito Delfín, a quien se le olvidó que el mensaje debe estar dirigido a la militancia y no a la familia Yunes.
Todos los asistentes se llenaron la boca de agradecimientos hacia los Yunes, cuando el mensaje debió haber sido generalizado para los panistas y no sólo para Miguel Ángel Yunes a quien mencionaron en varias ocasiones.
Tanto Tito Delfín, Indira Rosales e incluso Juan Manuel de Unanue, quienes fueron de los pocos que tomaron la palabra, se la pasaron dando gracias a la familia Yunes.
Hay que dejar una cosa en claro: los Yunes no son el PAN, Acción Nacional es un partido con muchos años y valores importantes, que parecen desaparecer cuando de la familia de de El estero se trata. Sólo falta que al PAN le quieran cambiar las siglas.
Lo peor de todo fueron los acarreados que llevaron en la madrugada a aplaudir a quienes ni siquiera fueron al evento. Quieren hacer creer que ellos no están detrás de todo, pero no los dejan de mencionar, para que los panistas no olviden quien es realmente importante en ese grupo. Vaya, ni siquiera Tito lo es y eso que es el candidato.
La candidata a Secretaría General, Indira Rosales, quien por cierto dejó su lugar en el Senado para dárselo a Morena, subió al estrado a decir que estaba orgullosa de representar a Fernando Yunes y Miguel Ángel Yunes, en ese lugar, más no así a las mujeres panistas. ¡Que lástima!, queda en claro que ven por los intereses de una familia y no los del partido.
En conclusión son los mismos rostros de siempre, los mismos yunistas de siempre, nada nuevo, a diferencia de Joaquín Guzmán que cuenta con una planilla más fresca y con verdaderos miliantes, que no pertenecen a una sola familia, sino que son de diferentes partes del estado.
PEPE MANCHA DEFIENDE LO INDEFENDIBLE
Con todo el cinismo del mundo, Pepe Mancha salió a defender lo indefendible diciendo que la herencia que dejó al PAN fueron triunfos electorales.
Eso significa que minimiza el hecho de que dejó una deuda millonaria al partido, de más de 156 millones de pesos, recursos que no pudo solventar; es decir, recursos que no supo decir en qué se los gastó cuando fue dirigente del partido.
Esos recursos que se los gastó a diestra y siniestra, fueron observados por el INE y que por tal motivo su partido recibió una multa millonaria, algo que el ex Secretario del Comité estatal Tito Delfín sabe perfectamente, porque era el encargado de recibir la documentación. Recordemos que el hoy candidato a ser Presidente del Comité Estatal, estaba en el anterior comité y ha guardado silencio en complicidad con sus nuevos jefes y aliados.
Lo curioso es que mientras ese dinero desaparecía, a él misterioramente le dio la solvencia de crear dos medios de comunicación, que astutamente puso a nombre de su mamá y su esposa.
Por cierto, cuentan los ex empleados de uno de sus medios hechos con recursos panistas, que la ex diputada local, esposa de Pepe Mancha, gritaba por los pasillos del edificio Nachita, que ese proyecto se creó por dinero y astucia de su esposo. Esto es verdad a medias, porque si fue por la astucia de Pepe Mancha para robar, pero el dinero era de los panistas.
Sin embargo, para él eso no tiene importancia. Robarle a su propio partido no es la gran cosa, no ganar municipios sí es un pecado. ¡Todos los panistas perdedores se irán al infierno por eso!, ¡Cuidado con lo que dice!, en una de esas hasta él mismo se hunde en el inframundo, porque recordemos que ni Tuxpan pudo ganar y, perdió la Gubernatura a manos de MORENA.
Así que en conclusión, que alguien le diga que sus prioridades están mal, pues aunque se pierda un municipio, éste con trabajo se puede recuperar, pero robarle a la gente, a tus amigos y militantes ¡está canijo!, al ratero ya no se le vuelve a tener confianza. El tiempo lo dirá.
