Parece que los Yunes de Boca del Río anda como que nerviosos…
Y no es por nada: todo apunta a que les van a anular la elección; en una de esas, hasta revertir.
Mientras tanto, para hacer creer que no pasa nada (muy al estilo de sus orígenes de Medio Oriente, como cuando Saddam Hussein decía que todo estaba bien y no había de qué preocuparse, en pleno derrocamiento), convocan a ruedas de prensa donde invitan a Patricia Lobeira, la candidata impugnada por Morena y quien no ha sido ratificada por la autoridad electoral como presidenta municipal electa de Veracruz.
En medio de ese hecho, de todas maneras la exhiben y placean para intentar esconder la realidad de la impugnación. Por ejemplo, hoy, en la sede del Ayuntamiento, la Lobeira “anunció” que habrá Carnaval, pero de todas maneras pidieron auxilio al Gobierno de Veracruz para que pague a los artistas.
Es curioso, pero teniendo tanta lana los Yunes (más por sus negocios inmobiliarios con prestanombres) deberían pagar fácil 5 o 10 carnavales de su propio bolsillo, sin broncas.
A Patricia Lobeira no sólo la exhiben, sino también la están comprometiendo con situaciones que todavía no pueden prometerse.
