Víctor Hugo Moreno Hernández
Vecinos de la calle Rafael Delgado piden que el Ayuntamiento de Xalapa y la Comisión de Agua del Estado de Veracruz (CAEV) concluyan la obra de pavimentación que se inició hace aproximadamente un año, luego de la introducción del colector pluvial “Cuauhtémoc”, con el que se pretende erradicar el problema de inundaciones que padece la zona.
“La calle estaba asfaltada, tenía algunos baches pero estaba asfaltada, entonces ellos dicen que la van a dejar tal y como está; con la pequeña lluvia que hubo ayer ya se hizo un deslave en la tierra”, señaló Manuel de Jesús Ramírez Gómez, quien afirmó que la calle se encontraba mejor antes de ser intervenida.
Habitantes de la vía, perteneciente al fraccionamiento Jardines del Castillo, aseguraron que un ingeniero a cargo de los trabajos les avisó que el proyecto fue suspendido debido a una supuesta falta de recursos; “la última vez que se intervino fue hace aproximadamente un mes, cuando el personal contratado terminó de construir guarniciones y banquetas”.
La señora Diana Itzel Garrido González es otra vecina que se unió al reclamo por la obra inconclusa, ya que hace dos meses su vivienda se inundó debido a que el material abandonado provocó el taponamiento de la red de drenaje, lo que a su vez derivó en la inundación de su casa.
“Se desbordó el drenaje y salió por la tarja del baño y la parte de atrás de mi patio; se inundó y desafortunadamente se perdió todo”, recordó; ahora vive con la incertidumbre de que su hogar vuelva a inundarse.
Además de las afectaciones los vecinos reclamaron que la maquinaria empleada en la obra destruyó los cimientos de una torre de la Comisión Federal de Electricidad, por lo que temen que la estructura de varios metros de altura se venga abajo con alguna lluvia o movimiento telúrico.
“Han roto todo el cimiento que tiene y eso se vuelve un riesgo para todos los vecinos de aquí, porque en cualquier mal movimiento, aire o circunstancia que haga presión sobre la torre se va a caer y le va a caer encima a las casas”, compartió angustiada la señora Carolina Ramírez Ramírez.