Hay Vero para rato

Los cambios que realizó este día la Fiscal General del Estado en la estructura de la FGE han sido interpretados por acuciosos e inteligentes analistas como una sacudida y al mismo tiempo una “limpia”.

Además, no pasa desapercibido el hecho de que en estos movimientos se dan aún más oportunidades a las mujeres.

A los agoreros  de escenarios catastrofistas les decimos fuerte y claro: hay Vero para rato.

Ya el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, lo dijo muy clarito: con la nueva fiscal las cosas han mejorado en el estado de Veracruz, y prueba contundente e irrefutable de lo anterior ha sido la disminución de delitos de alto impacto. A esta apreciación, y en los mismos términos se pronunció el gobernador Cuitláhuac García Jiménez.

Los que se desgarran las vestiduras, festinan liberaciones de “grillos” que aún siguen bajo sospecha, y tienen fama de todo, menos de ser personas honorables.

Esas son elucubraciones y grillas del llamado “círculo rojo”, porque si vamos a la calle, a las colonias, a las congregaciones, a los mercados, etc., si le preguntamos a la gente, al pueblo, a ellos lo que les interesa y les preocupa es vivir en paz, y creemos -con bases en cifras y datos duros, no en “chaquetas” mentales de los catastrofistas- que poco a poco se está pacificando al estado. Y en gran parte, estos buenos resultados se deben a la Fiscalía que encabeza Verónica Hernández Giadáns. Han sido muchos los peces gordos de la delincuencia organizada que han sido detenidos, los mismos que en tiempos pretéritos no los tocaban ni con el pétalo de una rosa, o si eran aprehendidos, eran liberados previo pago de incalculables sumas de dinero.

Pero los que piden la “renuncia” de Verónica, seguramente desean que vuelvan los tiempos de Winckler cuando recibían jugosas prebendas.

Estos pitonisos en desgracia se quedarán con las ganas de que “renuncie” la Fiscal, porque insistimos: hay Vero para rato. Lástima Margaritos y Margaritas.