Las Fuerzas Armadas de Estados Unidos realizaron este martes una prueba de un misil balístico intercontinental desde de la base de la Fuerza Espacial Vandenberg en California.
La prueba estaba planeada con antelación y sufrió retrasos en dos ocasiones a raíz de la invasión rusa de Ucrania y de la escalada de tensiones en torno a Taiwán.
“Esta prueba no es el resultado de los eventos mundiales actuales”, remarcó el Comando de Ataque Global de la Fuerza Aérea en un comunicado.
El arma probada fue un misil balístico intercontinental ‘Minuteman III’, el cual alcanza velocidades de más de 24 mil kilómetros por hora y tiene un alcance de casi 10 mil kilómetros.
“Este lanzamiento de prueba es parte de las actividades de rutina y periódicas destinadas a demostrar que la disuasión nuclear de los Estados Unidos es segura, confiable y eficaz para disuadir las amenazas del siglo XXI y tranquilizar a nuestros aliados”, aseguró el mando militar.
Estados Unidos vive actualmente un momento geopolítico cargado de tensiones debido a las crecientes disputas con China y Rusia por asuntos como la soberanía de Taiwán y la guerra en Ucrania.