El miércoles por la tarde en Naples, Florida, Lauren Barlow observó cómo el agua entraba por la puerta de su casa y empezaba a subir por el primer piso.
“Los autos están flotando por nuestra calle”, dijo a CNN Barlow, que estaba refugiada en el nivel superior de la casa. “Nuestro garaje se inundó por completo, arruinando nuestros autos. Luego el agua empezó a pasar por la puerta hacia adentro y ahora está subiendo rápidamente por las escaleras, inundando el primer piso”.
Cerca de allí, los bomberos de la ciudad publicaron un video en Facebook caminando a través del agua fría que les llegaba al pecho mientras rescataban a una persona de las aguas caudalosas.
El huracán Ian, que tocó tierra como ciclón de categoría 4 en la costa suroeste de Florida poco después de las 15.00 horas, lleva horas azotando las comunidades costeras. Sus feroces vientos están arrastrando escombros, arrancando árboles, haciendo saltar las alarmas y derribando las líneas eléctricas.
John Iverson, un residente de Fort Myers, dijo a CNN el miércoles que habría evacuado si se hubiera dado cuenta de lo fuerte que impactaría en la zona. Iverson se refugió en la casa de un amigo el miércoles por la tarde, pero incluso allí, el primer piso estaba en su mayoría bajo el agua, dijo a CNN. Los autos en el garaje de la casa y los autos en el patio delantero de su amigo también estaban completamente sumergidos, dijo.
Iverson añadió que la casa en la que se refugiaba tiene varios niveles, por lo que puede permanecer seco.
Marcel Chartier, gerente del Diamond Head Beach Resort, se refugiaba en el hotel el miércoles por la noche mientras la tormenta azotaba la zona de Fort Myers, arrastrando autos y todo lo que encontraba a su paso. Al otro lado de la calle, un edificio entero estaba casi completamente bajo el agua, dijo Chartier a CNN.
“Los vientos son extremadamente fuertes, no podemos ver nada por las ventanas”, dijo Chartier. “El agua está muy alta y se acerca al tejado del edificio de enfrente”.
Las autoridades locales y estatales emitieron a principios de esta semana órdenes de evacuación obligatoria para más de 1,75 millones de personas en varios condados del suroeste, como los de Lee, Pinellas, Sarasota y Hillsborough. Para los que se quedaron, las autoridades locales advirtieron que la mejor práctica era refugiarse en el lugar y no aventurarse a salir.
En toda Florida, más de 1,3 millones de personas se quedaron sin electricidad el miércoles por la noche mientras la tormenta atravesaba el estado. (CNN).