El ex aspirante a Rector de la Universidad Veracruzana, Jorge Manzo Denes, hizo una fuerte crítica al reciente nombramiento del nuevo secretario académico, mismo que fue sorpresivo, ya que nunca se dio a conocer a la comunidad académica y estudiantil la salida de la anterior, Elena Rustrián Portilla.
La “renuncia” de la secretaria académica se da en el contexto de una crisis al interior de la UV, donde hace unos días hubo una fuerte protesta de alumnos, iniciando con la toma de instalaciones de la unidad de Humanidades, donde tuvieron que expulsar a un alumno violento de Antropología que agredió a otro estudiante con una navaja.
A eso suman también diversos conflictos, la mayoría relacionados con denuncias de acoso.
En Psicología, en Xalapa, los alumnos denunciaron falta de maestros y deficiencia de la directora de la Facultad, misma que habría estado negociando las plazas académicas para entregarlas a supuestos allegados.
En Veracruz, puerto, el pasado miércoles un grupo de personas que pertenecen al grupo civil del colectivo social “En contra de la corrupción”, desde las siete de la mañana tomaron las oficinas de la Coordinadora del Centro de Estudios y Servicios en Salud de la Universidad Veracruzana (CESS), donde señalan a la titular, Antonia Barranca, por presuntos actos de corrupción.
A continuación, la publicación del también reconocido investigador:
La Secretaría Académica de la UV
La tarde de ayer la comunidad de la Universidad Veracruzana recibió una noticia que yo considero un desacierto para la institución, la Junta de Gobierno designó al Dr. Juan Ortíz Escamilla como Secretario Académico. Me explico en estos puntos:
1. Se designa a un nuevo Secretario Académico. Hace un año la Junta de Gobierno nombró a una titular para un período de cuatro años ¿Porqué designar a otro? Los medios mencionaron en días pasados la renuncia de la titular, pero ni la Rectoría ni la Junta de Gobierno dieron a conocer un comunicado oficial, por lo que oficialmente no hay renuncia. Ahora parece que tenemos dos nombramientos para el mismo puesto.
2. Ahora sí, ayer la Junta de Gobierno hizo un comunicado oficial sobre la designación del Dr. Juan Ortíz Escamilla. Ahí mencionan que la designación la hacen de acuerdo a varias fracciones y artículos de la la Ley de Autonomía y la Ley Orgánica. Uno de ellos es el Artículo 40 de la Ley Orgánica que dice en una de sus fracciones que el designado debe ser menor de 65 años de edad. El Dr. Ortíz Escamilla tiene 67. ¿Qué pasó ahí? Esta designación contradice al mismo comunicado de la Junta de Gobierno porque la designación contraviene lo estipulado en nuestra Ley Orgánica.
3. El Artículo 4 de la Ley de Autonomía dice que la designación se hace a partir de una terna propuesta por el Rector. No se nos comunicó de la renuncia, ahora tampoco se nos comunica de la terna ¿Porqué? ¿Quienes la integraron? ¿Porqué la opacidad?
4. Hace un año el Dr. Ortíz Escamilla fue designado Director General de Investigaciones, y ahora salta a la Secretaría Académica. ¿Bajo qué méritos? Dice un amigo filósofo, una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa; respeto y reconozco la gran trayectoria académica del Dr. Ortíz Escamilla, pero como autoridad universitaria deja mucho que desear. Yo soy investigador y por tanto me tocó ver directamente su desempeño en su investidura como Director de Investigaciones, y lo califico como de bajos logros; vaya, ni siquiera se presentó este año ante los investigadores como el nuevo director de investigaciones, nunca supimos que ahí estaba. Solicito a la Junta de Gobierno que nos haga un informe de trabajo de este año del Dr. Ortíz Escamilla al frente de la Dirección General de Investigaciones, sólo así sabremos si de verdad tenía los méritos para estar en una terna (si es que la hubo) y si tiene competencias para un puesto tan crucial para la universidad como lo es la Secretaría Académica.
5. Muchos dirán que el nombramiento ya se hizo y no queda más que aceptarlo, pero no lo creo así. Las manifestaciones estudiantiles de los últimos días nos han enseñado que las cosas pueden cambiar. Los estudiantes ya nos enseñaron y ya hicieron su parte, que aplaudo, ahora nos corresponde a los académicos.
6. La UV es de todos.
