José Ortiz Medina
No faltaron los analistas despistados que especularon que Margarita Corro no era cercana al líder de los legisladores de Morena en el Congreso Local, sino que por su oriundez, la legisladora estaba más pegada a poderoso funcionario estatal de la 4T.
No sabemos hasta qué punto sea cerca o no doña Mago al poderoso funcionario estatal, pero lo que sí quedó claro este lunes es que Margarita goza de todo el cariño y el afecto de Juan Javier Gómez Cazarín.
Y es que el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) le dedicó este lunes su columna Parlamento Veracruz a Margarita, lo cual dio título a la entrega del texto de opinión que fue enviado a las redacciones de los medios de comunicación en el inicio de esta semana.
Pero además, Juan Javier hizo una revelación en la citada columna:
“Me voy a aventar una indiscreción. El año pasado Margarita ya se nos andaba queriendo rajar. No por nada malo, al contrario: pensando generosamente, como una auténtica demócrata y con el espíritu de servicio de quienes no necesitan un puesto o una investidura para trabajar a favor del pueblo, Margarita estaba considerando ceder su espacio para que alguna otra compañera o compañero de La Cuenca tuviera oportunidad de representar a su distrito”.
Añadió: “Pero en las encuestas internas de Morena aparecía que la gente del Distrito XXIII estaba contenta con Margarita y quería que ella siguiera siendo su Diputada. En un Distrito donde hubo nada menos que ¡10 candidaturas!, Margarita ganó con el 53 por ciento de los votos, que fueron más del doble del que quedó en segundo lugar. A la que no quería reelegirse, el pueblo no la dejó irse”.
Y remató así la columna: “Hoy le deseo y le pronostico una gran gestión como Presidenta de nuestro Poder Legislativo. Desde ahora estamos orgullosos de ella”.
En varias ocasiones, al entrar a charlar en su oficina con Gómez Cazarín, quien esto escribe coincidió varias veces en la antesala con Margarita Corro, con quien también dialogamos sobre nuestras raíces cuenqueñas. Y en esos encuentros fuimos testigos del trato cálido, y hasta de amigos que Juan Javier le prodigó a la diputada.
Pero por si hubiese duda de lo antes expuesto, las fotos que la dirección de Comunicación Oficial envió para acompañar la publicación de la multicitada columna, hablan por sí mismas. Hay cariño, y bien.
