*INFORME ROJO / MUSSIO CARDENAS: “LAS DIATRIBAS DE JOSÉ PABLO ROBLES CONTRA ROCÍO NAHLE SON CHISME DE LAVADERO… Que la secretaria de Energía se arregló con los Yunes azules. Que si el senador Julen Rementería le debe comentar ese negocio al líder máximo del Partido Acción Nacional, Marko Cortés. Que si el que sabe la verdad sobre los contratos es el director general de Pemex, Octavio Romero Oropeza. Embozado, como siempre, sin dar la cara, como siempre, José Pablo Robles usa el pseudónimo de Maquivelo evidenciando que con Rocío Nahle la correlación de fuerzas y de poder, cambió. Más fácil, que se deje de chismes y la acuse con López Obrador. A menos, claro, que el presidente haya dejado de abrirle los oídos al jefe del Clan de la Succión. La zacatecana hace rato que nada con vejigas propias. Se habla en directo con Andrés Manuel. Acuerda con Andrés Manuel. Es escuchada por Andrés Manuel. Tendrá mil defectos pero su interlocución con el presidente se mantiene en el máximo nivel. Lo único que la podría descarrilar es Dos Bocas, la refinería Olmeca que debe comenzar a producir dentro de dos semanas, como ofreció López Obrador y que se duda que así ocurra. ¿Qué llevó a Robles Succión, dueño de Diario del Istmo, Imagen de Veracruz e Imagen del Golfo, su consorcio patito que ya no influye en nadie, a armar tal chismerío contra quien suponían sería su palanca para atesorar más poder? Si Nahle se amarró con los Yunes guindas, los del Estero, políticamente hizo lo que nadie había logrado, domarlos. Y ya sin enemigo de peso en el PAN, se enfila hacia la candidatura de Morena al gobierno de Veracruz. No necesitó de Robles y los succionadores para sacar del camino a sus enemigos jurados. Ni lo peló. Y ya rebasado, José Pablo arma su chismerío. Ahí, entre Robles y Nahle hay punto de fricción…” (FUENTE: INFORME ROJO, MUSSIO CARDENAS, 17/JUNIO/2023).