En septiembre de este año, Dos Bocas refinará el primer barril de gasolina

EXCÉLSIOR

En septiembre próximo se prevé que la Refinería Olmeca produzca su primer barril de combustibles, lo que dará inicio a una nueva era en el sistema de refinación nacional, rumbo a la soberanía energética.

La refinería, ubicada en Dos Bocas, Tabasco, se sumará a las seis existentes en México y a Deer Park, en Estados Unidos, una vez que se concluya el proceso de integración de todas las plantas que la componen, con el objetivo de lograr la autosuficiencia nacional en materia de combustibles.

El complejo, cuya Primera Etapa Constructiva fue inaugurada por el presidente Andrés Manuel López Obrador el 1 de julio de 2022, busca un cambio de paradigma energético, con el que México abandonará la postura de un país subdesarrollado, concentrado en la exportación de materias primas, ya que se adquirirá un mayor grado de industrialización.

Soberanía

La refinería de Dos Bocas impactará en el grado de industrialización del país.

340,000 barriles de crudo diario procesará la refinería.
230,000 empleos ha generado de forma indirecta.

Refinería de Dos Bocas rumbo a la soberanía energética

En el mediano plazo, este proyecto ayudará a que México alcance la autosuficiencia en la producción de gasolinas y diésel para ofrecer mejores precios de estos combustibles a los consumidores.

La Refinería Olmeca es un sitio de trabajo frenético.

Una vez que se concluya el proceso de integración de todas las plantas que la componen, la refinería se integrará a las seis existentes en México y a Deer Park, en Estados Unidos, en un intento de lograr la autosuficiencia en materia de combustibles.

El reporte más reciente de la secretaría de Energía, Rocío Nahle, encargada del proyecto, correspondiente al pasado 12 de mayo, señala que actualmente se está en proceso de poner en marcha cada planta y posteriormente interconectarlas, para una vez que se logre que trabajen juntas, comenzar a introducir el petróleo para refinarlos y producir gasolinas.

La fecha para comenzar a tener los primeros barriles es incierta. Tentativamente será en septiembre de este año cuando se tenga el “primer barril de combustibles”. Pero puede ser más tarde.

Fue hace casi un año, el 1 de julio de 2022, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador inauguró la Primera Etapa Constructiva de la Refinería Olmeca, cuyo objetivo es lograr, en el mediano plazo, la autosuficiencia en la producción de gasolinas, de diésel y de esta manera ofrecer mejores precios de estos combustibles a los consumidores.

En esa ocasión, Nahle informó que la planta procesará 340 mil barriles diarios de crudo, con lo que producirá 170 mil barriles de gasolina y 120 mil barriles de diésel de ultra bajo azufre. Su infraestructura básica, destacó, prácticamente se construyó en dos años.

“Es un sueño convertido en realidad”, afirmó el titular del Ejecutivo federal tras encabezar el corte de listón inaugural y recorrer las instalaciones, para luego informar el inicio de los trabajos de prueba.

Al destacar el trabajo de obreros, ingenieros y directivos de la Secretaría de Energía y de Pemex, recordó que durante más de 40 años no se construía una refinería en México desde el inicio de labores de Salina Cruz, en 1974.

“Vendíamos petróleo crudo y comprábamos gasolinas, eso es lo que ahora está cambiando, es una reconversión, es un viraje, ya no vamos a vender petróleo crudo, vamos a procesar toda nuestra materia prima para producir las gasolinas y el diésel. Y esto, además de que significa empleos, significa también ser independientes”, sostuvo.

Antes de elegir Dos Bocas como el sitio para la nueva refinería, se analizaron dos opciones más: Tuxpan y Coatzacoalcos, Veracruz. La decisión se la llevó el puerto tabasqueño ya que ahí llegan diariamente un millón de barriles de petróleo crudo del litoral de Tabasco y de la sonda de Campeche, además de que tiene el autoabasto de gas asegurado.

De acuerdo con Nahle, 72% de la obra es de contenido nacional.

La filial PTI de Pemex, administradora del proyecto, había recibido hasta hace un año diez mil millones de dólares, de los cuales ocho mil 915 han sido para gasto e inversión, así como mil 426 millones de dólares de pago de impuestos.

El gobierno federal ha destacado que Dos Bocas representa un cambio de paradigma energético, con el que México abandonará la postura de un país subdesarrollado, concentrado en la exportación de materias primas, ya que se adquirirá un mayor grado de industrialización, sello de las naciones de primer mundo.

Asimismo, otros objetivos son incrementar la elaboración de productos de mayor valor agregado en el país, cuidar la balanza comercial e impulsar el desarrollo económico y social del sureste mexicano.

COMPLEMENTOS

A Dos Bocas se suma la rehabilitación de las seis plantas que conforman el Sistema Nacional de Refinación, lo que incrementará de manera sustancial la oferta nacional de combustibles, para satisfacer la creciente demanda.

La de Salamanca es intervenida en dos etapas; la primera desarrolla el mantenimiento del tren de proceso para producir al 75% de su capacidad.
En la de Tula, como parte fundamental, se intervino la planta de H-Oil, que estaba abandonada y era indispensable rehabilitarla para aumentar la producción de gasolinas.
La de Cadereyta requería mantenimiento profundo a los equipos dinámicos.
La refinería de Madero tenía la infraestructura más crítica al haber estado más de un año fuera de operación.
La de Minatitlán recientemente fue reconfigurada, pero requiere cambio de catalizador y rehabilitar la planta Mina 1.
En la de Salina Cruz, derivado de los accidentes en sus instalaciones, se diseñó un programa intenso para reconstruir el sistema de recibo de crudo y distribución de plantas primarias.
Refinería de Dos Bocas.
Refinería Deer Park, Texas.

DESARROLLO

La obra se dividió en seis paquetes, en los cuales se construyeron 17 de plantas de proceso químico, entre ellas la combinada, una coquizadora y las hidrotratadoras de gasóleos, diésel y naftas. También está conformada por:

90 tanques de almacenamiento, de los cuales 56 son verticales para acopiar líquidos.
34 esferas para gas, con una capacidad de almacenamiento de 15 millones de barriles.
Y el sistema de cogeneración para producir su propia electricidad de 280 megawatts y el vapor necesario para la operación.
91,459 equipos que deben trabajar en forma coordinada.
405,113 toneladas de estructura de acero.
1,972,423 metros cúbicos de concreto
4,109 equipos mecánicos
2,145 equipos dinámicos
1,964 equipos estáticos
1,957 equipos eléctricos
En todo el terreno se construyeron:

30,214 pilas estructurales
969,535 metros cúbicos de material
55,435 inclusiones de concreto
74,214 toneladas de varilla
35,236 trabajadores en forma directa, todos de origen mexicano; 12%, mujeres.
230,000 empleos se han generado de forma indirecta.