El presidente Andrés Manuel López Obrador, en su conferencia matutina desde Palacio Nacional, recordó el caso del penal de máxima seguridad que se construyó en la comunidad Gildardo Muñoz, en el municipio de Papantla (al norte del estado de Veracruz), mismo que ha sido una carga para el gobierno federal porque no se ha inaugurado ni utilizado.
El jefe del Ejecutivo recordó que dicho penal está privatizado por el dueño de un importante periódico nacional, y señaló que en su administración ya no se permiten estos esquemas “porque no es hacer negocio: es robar”.
“El dueño de El Financiero construye o reconstruye, porque hasta lo inauguró creo Calderón con García Luna, un penal en Papantla, Veracruz, y hay que pagar miles de millones de pesos porque privatizaron los penales. Entonces cuando ya no se permiten estas cosas, se ponen enfurecidos. Y esa es la explicación de fondo, ya no pueden robar, porque no es hacer negocio: es robar”.
El 19 de marzo de 2012, el entonces presidente Felipe Calderón y el gobernador Javier Duarte de Ochoa hicieron un recorrido de supervisión en los avances en la construcción del penal de super máxima seguridad en el municipio de Papantla. En ese entonces se conocían pocos detalles del proyecto o que tuviese como dueño al propietario de El Financiero.
En ese entonces se anunciaba que dicho penal se denominaría “Complejo Penitenciario Federal No. 3” y serían confinados los delincuentes más peligrosos del país, pues se presumía, incluso, como más seguro que el penal del Altiplano, anteriormente Almoloya de Juárez, ubicado en el Estado de México.
