Como dirigente estatal de los jóvenes aún se recuerdan las borracheras que protagonizaba Adolfo Ramírez Arana en la sede estatal priista o en los centros nocturnos de moda de aquellas épocas.
Era bastante conocido por sus excesos etílicos, por esas singulares riñas que encabezaba siempre alardeando poder político y económico.
Fueron tantas sus desproporciones porriles que varias veces fue a parar al entonces ministerio público por lesiones menores. Allí están los archivos y las fotos.
Bajo el membrete de AJUA, el “Fofo” se le fue metiendo primero a Fidel Herrera y luego al hoy recluso Javier Duarte quien hace unos días “destapó” a Adolfo como dirigente estatal del PRI. Este miércoles se cumple el vaticinio.
El “Fofo” y su esposa Ana Rosa Valdez, forjaron sus carreras políticas gracias al impulso que les dio Rosa Borunda y Fidel Herrera, así como Javier Duarte.
Son los bebesaurios del sistema priista veracruzano. Una auténtica defecación de lo más podrido del Revolucionario Institucional. Ya luego les contaremos sobre Lorena Piñón, la nueva Secretaria General del CDE, quien también tiene su historia.