El Ministro Javier Laynez suspendió en su totalidad la extinción de fideicomisos del Poder Judicial de la Federación (PJF), que suman 15 mil 800 millones de pesos, al admitir a trámite acciones de inconstitucionalidad promovidas por senadores y diputados de Oposición.
Para invalidar la reforma, será necesario el voto de al menos ocho de los once ministros.
La suspensión concedida por Laynez -que el Congreso y el Ejecutivo impugnarán ante una Sala de la Corte- es altamente inusual, pues en teoría los ministros instructores no pueden frenar la vigencia de leyes impugnadas en este tipo de acciones.
La orden de Laynez se suma a por lo menos 17 suspensiones dictadas por jueces federales que tramitan amparos promovidos por personal, asociaciones y sindicatos judiciales, de las cuales al menos cinco ya son suspensiones definitivas, mientras que el resto son provisionales, aunque algunas no incluyen los fideicomisos de la Corte, sino solo los del Consejo de la Judicatura Federal (CJF).
Dichas suspensiones estarán vigentes durante todo el tiempo que tome el trámite de los amparos, que alegan violaciones a derechos Constitucionales de independencia judicial, acceso a la justicia -pues se extinguen fideicomisos para infraestructura-, y no aplicación retroactiva de las leyes.
Todas estas suspensiones impiden, por ahora, que la Ministra Presidenta Norma Piña negocie con el Ejecutivo el uso de parte del dinero de los fideicomisos para apoyar a ciudades de Guerrero devastadas por el huracán “Otis”.
La Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal (CJEF) ya ha solicitado a la Corte que atraiga los recursos de queja y de revisión que ha interpuesto para impugnar las admisiones de estos amparos, así como las suspensiones definitivas.
Pero el proceso de atracción no es automático. Las salas de la Corte tendrán mañana sus últimas sesiones del año, mientras que el Pleno terminará sus labores la próxima semana, y esas serán las últimas oportunidades para atraer los recursos.
Las acciones admitidas hoy por Laynez, sin embargo, son el juicio principal en el que se resolverá este tema, pues no requieren trámite ante varias instancias como los amparos, y una eventual sentencia de invalidez tendrá efectos generales.