Fernando Medina mejor conocido como “El Tiburón” quien golpeó en julio del año pasado a un trabajador de la cadena de restaurante de comida rápida Subway, en San Luis Potosí, fue asesinado en un gimnasio en la colonia General I. Martínez en la capital potosina.
De acuerdo con los primeros reportes, “El Tiburón” llegó a un gimnasio cuando fue agredido a balazos por un sujeto que ya lo esperaba en el lugar para después darse a la fuga.
¿Cómo fue la agresión a un menor en un Subway?
El 31 de julio de este año, “El Tiburón” acudió a un Subway en la capital potosina, donde tras discutir con un joven de 15 años, empleado del lugar, lo agarró a golpes y lo dejó tirado en el suelo.
El caso se viralizó al compartirse en redes sociales un video de la agresión, tras lo cual, las autoridades iniciaron la búsqueda de “El Tiburón” para que pagara por sus acciones.
Fue hasta el 11 de agosto que lograron su captura, procesándolo por el delito de homicidio calificado, en grado de tentativa agravado, por el cual, se enfrentaba una condena de 12 a 50 años de prisión.
Tras su arresto, la defensa de “El Tiburón” solicitó un amparo contra el proceso penal en su contra, la cual le fue concedida a finales del mes de agosto. Desde entonces, los abogados del “Tiburón” se movieron para que el delito por el que se le acusaba, se reclasificara por uno que conllevara menores condenas y hasta la libertad.
¿Quién era “El Tiburón”?
Fernando Medina tenía una licenciatura en Derecho y era maestro de artes marciales.
También se supo que “El Tiburón” era propietario de tres negocios de los cuales uno fue clausurado, luego de que en redes sociales se hiciera viral el video de la agresión al joven del Subway. Era un local de autopartes que no contaba con las licencias de funcionamiento.
Asimismo, era propietario de un depósito de cerveza y también de un gimnasio llamado “Power House Gym” donde grabó varios videos en redes sociales y se pavoneaba de los músculos que tenía.
En diciembre de 2023, “El Tiburón” quedó en libertad tras acordar con un juez de la entidad, una suspensión condicional del proceso en su contra.
“El Tiburón” se encontraba recluido en el penal de La Pila, a espera de la resolución del juicio en su contra por el delito de homicidio calificado en grado de tentativa agravado, salió de prisión.
Para obtener su liberación “El Tiburón” solo tuvo que cumplir con un pago monetario por reparación del daño, además de cumplir otra medidas alternas para la protección de la víctima, tales como: no salir de su residencia y no acercarse al joven que golpeó.
