En medio de la implementación del racionamiento de agua en Bogotá, el alcalde de la capital colombiana, Carlos Fernando Galán, sugirió diversas estrategias para fomentar el ahorro de este recurso vital. La medida de racionamiento entrará en vigor este jueves, 11 de abril, afectando a diferentes sectores de la urbe.
Una de las recomendaciones más inusuales del alcalde es la sugerencia de no bañarse si se va a permanecer en casa durante el fin de semana y que se deben de bañar en pareja. El mandatario explicó que reducir drásticamente el tiempo de baño puede tener un impacto significativo en el ahorro de agua.
“Si el domingo no va a salir de su casa, aproveche y no se bañe. Aguante en la casa durante el fin de semana y el lunes va y se baña”, expresó Galán durante una entrevista al canal de televisión Caracol. “Cuando uno tiene hijos sabe que eso no es tan grave, uno dice ‘uy papito’, pasemos de agache (dismularse) y solamente lo necesario”, agregó.
Galán también compartió su propia experiencia personal, revelando que ha reducido el tiempo que tarda en ducharse a solo tres minutos. Estas medidas, aunque pueden parecer extremas, buscan crear conciencia sobre la importancia de conservar el agua en momentos de escasez. Otra sugerencia del alcalde es fomentar el baño en pareja como un ejercicio pedagógico de ahorro de agua.
“Se trata de un ejercicio pedagógico de ahorro de agua, no de otras cosas. Ese tipo de cosas nos van a ayudar mucho. Esos cambios de comportamientos son claves”, enfatizó Galán.
Bogotá y algunos municipios aledaños tendrán racionamiento de agua a partir del jueves por el bajo nivel de los embalses que causa el fenómeno climatológico de El Niño. Como consecuencia de la sequía que ocasiona El Niño, tres embalses que abastecen de agua a la ciudad tienen bajos niveles, explicó Galán. Diez municipios cercanos sufren el mismo problema y también tendrán racionamientos.
En enero, la falta de lluvias ocasionó cientos de incendios forestales en Colombia que consumieron unas 17 mil 100 hectáreas de bosque.
En la capital, los cerros orientales de la ciudad ardieron por varios días. La semana pasada, la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, calificó de “responsable” la decisión de Galán ante las “temperaturas inusitadas” de hasta 24 grados centígrados en Bogotá, una ciudad andina y tradicionalmente fría. Se espera que vuelva a llover a finales de abril o principios de mayo.