José Ortiz / EN CORTO
El proceso de entrega-recepción entre el gobierno estatal saliente y el entrante no ha sido “miel sobre hojuelas”.
Por el contrario, las versiones señalan que se ha puesto bastante rudo en algunas dependencias donde está prevaleciendo el sospechosismo.
Y es que al menos hay tres Secretarías en donde se han ordenado desde ya auditorías externas sin decir “agua va”, pues solo llegan los integrantes del despacho pidiendo una oficina e internet.
Obvio esto no gustó nadita en Palacio de Gobierno y de inmediato el gobernador pidió una explicación al respecto porque ni siquiera ha culminado el sexenio, por lo que el tema se pondrá “color de hormiga” entre morenistas.
Asimismo, se ha sabido de inmejorable fuente que quien ha emprendido este terrorismo psicológico ha sido de manera específica Rodrigo Calderón, quien contrató un despacho xalapeño para “auditar” a las secretarías y demás entes administrativos.
Lo malo del asunto es que las Contadoras de ese despacho llegan a las dependencias en mal plan, muy empoderadas, y lo primero que dicen al arribar a las oficinas es que van de parte de Rodrigo Calderón “coordinador del equipo de transición” de la gobernadora electa.
Lo grave del asunto es que nos hacen ver que de acuerdo con la ley, es a partir del 1 de diciembre cuando formalmente debe iniciar el proceso de entrega-recepción, así que lo que están haciendo Rodrigo Calderón y las Contadoras de ese despacho contable está totalmente al margen del marco legal.
Nos refieren que la ley que regula esa parte del procedimiento de la entrega-recepción está contemplado en la Ley 336, la cual en su Artículo 11 establece que “en los casos de conclusión de un período constitucional, el protocolo de Entrega y Recepción se realizará el día primero de diciembre que inicie sus funciones el Gobernador del Estado, en términos de la Constitución Política Local, esta Ley y los documentos que expida en el mes de enero anterior la Contraloría General”.
Pero no cabe duda que Rodrigo Calderón anda desbocado y tomándose además atribuciones que no le corresponden pues no olvidemos que él sólo será titular de la Sedarpa y de ninguna manera debe asumir funciones que no son de su competencia.
Ya habíamos informado en anterior ocasión que el acelerado del Rodrigo Calderón, en una actitud de “Jefe de Gabinete” que él mismo se asignó, comenzó a ordenarle a futuros secretarios de despacho o de otras dependencias que contrataran a ciertas personas como secretarios particulares o directores administrativos, ello sin siquiera haberlo consultado con Rocío Nahle. Tras las quejas de los venideros titulares de las secretarías, fue que el político martinense le bajó de yemas.
Mal, muy mal este grillo de rancho que cree que puede venir a vender espejitos.
