Primero fue Moody´s y ahora es HR Ratings la que también cambia perspectiva de México de Estable a Negativa

La calificadora HR Ratings ratificó la calificación de largo plazo y de la deuda soberana de México en BBB+.

Sin embargo, la empresa calificadora modificó la perspectiva de la economía nacional a largo plazo de Estable a Negativa.

Este cambio se debe, según la empresa, al “deterioro en nuestras estimaciones de crecimiento económico en 2024 y 2025 para México, así como de nuestra expectativa de una reducción más lenta del déficit fiscal para 2025, respecto a lo estimado por la Secretaría de Hacienda (Hacienda), lo cual podría presionar la deuda neta como proporción del Producto Interno Bruto (PIB)”.

Se trata de la segunda calificadora internacional en apreciar el mismo cambio, después de que el pasado 15 de noviembre Moody´s cambió de estable a negativa la perspectiva económica de México.

Aquí los comentarios de HR Ratings:

La reducción en nuestra expectativa de crecimiento para el soberano es resultado del comportamiento negativo que ha mostrado la actividad industrial durante los últimos doce meses, especialmente por el menor dinamismo del sector de la construcción, además de una desaceleración del sector manufacturero y una menor demanda externa.

Asimismo, el cambio de administración esperado en enero de 2025 en Estados Unidos podría llevar a un deterioro en la relación comercial con el principal socio comercial de México, y por lo tanto continuar afectando negativamente el desempeño del comportamiento económico.

Con esto, esperamos que el crecimiento económico en 2024 sea de 1.4% y de 1.1% para 2025, lo cual es menor a lo esperado por Hacienda en los Criterios Generales de la Política Económica (CGPE25), de 2.1% y 2.3%1 respectivamente. Igualmente, es menor a lo esperado por HR Ratings en abril, cuando se estimó un avance de 2.5% y 2.0% para 2024 y 2025, respectivamente.

La disminución en la expectativa del desempeño económico y una mayor depreciación del tipo de cambio respecto al estimado en abril llevarían al Saldo Histórico (SH)2 al cierre de 2024 a 52.24% del PIB, lo cual es mayor al esperado anteriormente en las proyecciones de HR Ratings de 50.76%.

En línea con los CGPE25, HR Ratings espera una reducción en el déficit de los Requerimientos Financieros del Sector Público (RFSP)3 para 2025.

Sin embargo, el deterioro en nuestras expectativas de crecimiento, el comportamiento histórico del endeudamiento y el tipo de cambio esperado llevarían a nuestra métrica de deuda neta a PIB a 54% al cierre de 2025, lo cual es mayor al 52.33% esperado anteriormente, así como del 51.4% estimado por la Secretaría de Hacienda.

Es importante destacar que consideramos positivo el compromiso mostrado en los CGPE25 para la reducción en el déficit fiscal de 2025, y con esto mantener el nivel de endeudamiento relativo a PIB.

Sin embargo, consideramos que sería difícil mantener en el largo plazo el bajo nivel de gasto de capital que suponen los CGPE25 sin consecuencias negativas para el desempeño económico. Adicionalmente, la rigidez a la que se encuentra sujeta el gasto corriente (especialmente en subsidios y transferencias) se suma a las presiones por parte del servicio de la deuda, lo que naturalmente continuaría afectando el desempeño fiscal.

Por otra parte, la incertidumbre provocada por el cambio de administración en Estados Unidos en enero 2025 podría tener implicaciones negativas en la relación comercial en ambos países.

El riesgo de la introducción de nuevos o mayores aranceles a las importaciones de bienes producidos en México podría tener un impacto profundo en el sector industrial, aumentando la incertidumbre entre los inversionistas y podría incidir negativamente en los niveles de actividad económica y en el comportamiento del tipo de cambio.

Adicionalmente, el endurecimiento a la política migratoria por parte de la administración estadounidense entrante podría complicar todavía más las relaciones con ese país.

No obstante, HR Ratings dará seguimiento al desempeño de las principales variables que impactan el crecimiento en los próximos meses, con el objetivo de identificar cualquier desviación que afecte la calidad crediticia del soberano.