Este domingo 15 de diciembre, la gobernadora Rocío Nahle anunciará con bombo y platillos la rehabilitación del tramo carretero Pánuco-Tempoal, Tantoyuca-Tuxpan.
Desconocemos si a la mandataria estatal los técnicos de la SICT y SIOP ya la pusieron al tanto que ese tramo carretero ha sido rehabilitado muchas veces en anteriores administraciones federales, pero que pocos meses después de rehabilitada la carretera -sobre todo en la parte que comprende de Tepentzintla a Tantoyuca- comienzan a notarse hundimientos, vados, “chipotes”, ondulaciones y demás. ¿La razón? Las características del suelo. Es demasiado arcilloso, y ese tipo de arcilla -con las lluvias y la humedad- provoca esas fallas al poco tiempo de reinaugurada la carpeta asfáltica.
Así que hay sólo de dos sopas: o rehabilitar la carretera sólo para la foto y “demostrar” a la ciudadanía que este gobierno sí está “reparando” esas vías de transporte o bien realizar una inversión mayor para que los materiales no sólo sean de mayor calidad, sino que antes de revestir la carpeta asfáltica se coloque una capa de material más sólido que cuando menos le dé una mayor durabilidad a la obra. Obvio que esta segunda opción es demasiado cara y el tiempo de rehabilitación será más largo.
Pero en fin, ya se verá.
Por cierto, ¿ya estará enterada la gobernadora que algunos grupos de allá del norte tratan de realizar un bloqueo carretero en víspera de su visita, con el pretexto de que carecen de agua? La demanda es legítima, aunque se advierte cierto tufo a boicot de su gira. (José Ortiz / EN CORTO).