José Ortiz / EN CORTO
Este domingo, varios restaurantes y fondas del centro de Xalapa amanecieron sin agua.
Los que pudieron, compraron pipas del vital líquido, pero otros comerciantes de plano optaron por cerrar sus locales.
Este problema de escasez del recurso hídrico no sólo sucede en casas-habitación, sino también en oficinas, plazas comerciales y restaurantes; la crisis comenzó a agudizarse el año pasado, y según expertos consultados por Versiones, este año se pondrá peor la sequía.
El problema es que ni las autoridades municipales ni CMAS-Xalapa están ofreciendo una solución real a este desabasto del H2O.
Y es que tontamente tanto el alcalde como una timorata regidora, recomiendan a los ciudadanos xalapeños almacenar el agua. ¿Pero cómo van a almacenar algo que no les llega? Hay usuarios que no cuentan con el servicio desde hace una o dos semanas. Se necesita tantita masa gris o sentido común a estas autoridades para que dejen de hacer esas recomendaciones tan bobas.
Los tan cacareados pozos no han servido de nada y según que los van a poner a producir hasta el año entrante. Mientras tanto, en unas semanas comenzarán las campañas de los candidatos a presidentes municipales y los abanderados de oposición van a agarrar de piñata tanto al alcalde Alberto Islas Reyes como a la titular de CMAS, Ana Iris Ruiz Gómez.
Según que en breve la gobernadora Rocío Nahle dará una “buena noticia” sobre este tema, pero ojalá y sea una solución viable y definitiva y no meros paliativos. Un problema que se encuentra ya en “terapia intensiva” no necesita unas aspirinas, sino atención especializada a fondo.
Pero la neta, están totalmente perdidos. Dan pena ajena. Incluso, sorprendió que Alberto Islas Reyes, siendo abogado, haya dicho la sandez esa de que no pueden presentar denuncias contra los que se roban el agua “porque se politiza todo”.
“Es un delito, al final de cuentas, pero si actuamos contra ellos, lo convertimos en un tema complicado y se politiza todo”, fue la ocurrencia de este a quien considerábamos un abogado medianamente inteligente.
Señor Islas, aplique la ley, porque no es justo que ciudadanos paguemos el recibo cada mes -aunque sólo tengamos agua cinco días en ese lapso- y haya personas que se roben el vital líquido para que usted diga de manera blandengue que no pueden proceder simplemente porque les tienen miedo a esos infractores de la ley. Qué mal. Sólo queda usted en ridículo señor alcalde.