José Ortiz / En Corto
No es aventurado vaticinar que por vez primera la alianza Morena-PVEM ganará la alcaldía de Veracruz.
Razones hay de sobra para pensar que la 4T obtendrá el triunfo, pero por el momento mencionamos algunas:
1.- Tras el voto a favor de la reforma al poder judicial, la familia Yunes doblará las manos para quedar bien con la Presidenta Claudia Sheinbaum. Así que a la candidata del PAN, Indira Rosales San Román, los del clan de El Estero la van a dejar sola. Ella será la gran sacrificada, en un esquema de valores entendidos.
2.- En las últimas dos elecciones municipales los Yunes casi han dejado los pelos en el alambre. Sus triunfos han sido logrados en elecciones muy cerradas, producto del desgaste que ya tiene esa familia, la cual siempre postula a los mismos de siempre, o sea, a los que se apellidan Yunes.
3.- Indira es acaso el rival más débil. No se le conoce gran trabajo social y político en el municipio. No posee el carisma ni tampoco logra conectar con el electorado. Quedará en segundo lugar en la contienda y no por poca diferencia de votos.
4.- Por el lado de la 4T, Morena se ha ido afianzando sobre todo en las colonias populares, en donde los apoyos sociales serán definitivos para la victoria morenista.
6.- A quien postulen por la 4T ganará los comicios, aunque -claro está- unos abanderados o abanderadas sumarán más votos que otros u otras, para la causa cuatroteísta.
7.- Tanto PRI, como el PT y Movimiento Ciudadano no sólo no ganarán la alcaldía sino que tampoco serán ni siquiera medianamente competitivos. Su participación en la contienda será meramente testimonial.
8.- La gestión de Paty Lobeira no incidirá de manera favorable hacia la candidata del PAN, porque tras el divorcio con Miguel Ángel Yunes Márquez, los grupos panistas adheridos vía el yunismo andan al garete, sin timón ni rumbo. No saben para dónde “jalar”, por lo que están a la espera de las instrucciones de sus amos. Lo más seguro es que la poca estructura político-electoral de los Yunes por debajo del agua, abonará a la causa de la 4T o de plano se mantendrán neutrales o neutralizados, ello por indicaciones de sus jefes, los nuevos aliados de Adán Augusto López y Claudia Sheinbaum.
9.- No se descarta que Paty Lobeira decida apoyar aunque sea de manera subrepticia a la candidata o candidato de la 4T pero no por indicaciones de su ex marido ni de su ex suegro, sino por alguna alianza o puente que logre ella tender con la gobernadora Rocío Nahle. Paty Lobeira buscará por sus propios medios blindarse ante las auditorías que realice el ORFIS. Sumisión a cambio de impunidad, parece ser la clave de su estrategia de sobrevivencia.
10.- La gobernadora Rocío Nahle le va a echar toda la carne al asador en todos los municipios, pero en especial a Veracruz. Ahí ya ni siquiera será la Madre de Todas las Batallas. Más bien ahí será una batalla ya ganada por adelantado, por el contexto político electoral aquí descrito y en el que los Yunes -¡oh, paradoja!- serán la pieza clave para que Acción Nacional pierda la elección después de muchos años en el poder.
