Toda una farsa, la convocatoria abierta para aspirantes a candidaturas de personas juzgadoras, realizada por el Poder Judicial, que preside Lizbeth Aurelia Jiménez Aguirre.
Y es que ya se filtró que los favoritos de la presidenta y los consejeros serán los elegidos.
Muestra de ello es que recién inició la segunda etapa para verificar la elegibilidad de los aspirantes, y personajes como Víctor Priego, actual secretario de acuerdos del Consejo de la Judicatura a través de su secretaria particular (haciendo usos de recursos públicos), ya está pidiéndole a sus subordinados las credenciales de elector, porque ya se ostenta como candidato.
En los mismos términos anda el consejero Alejandro Huerta, quien también ya está subiendo datos de credenciales a una plataforma porque ya da por hecho que será candidato.
No obstante el designado por el exgobernador Cuitláhuac García Jiménez, no tiene mayor mérito que haber sido Juez Municipal del mismo Poder Judicial, cuya función más relevante es servir de notificadores de los Juzgados federales, personaje quien por cierto, aprovecha las instalaciones del Honorable Tribunal, para usarlo como su “cinco letras” personal con una proyectista del Consejero Antonio Sobrevilla.
De manera que ya están “palomeados” los candidatos y los demás juristas van a ser despachados lisa y llanamente.
Nota de la redacción: Fuentes del Palacio de Justicia nos aclaran que Víctor Priego no se inscribió al proceso de elección del Poder Judicial, aunque Alejandro Huerta sí se anotó como aspirante a juzgador. También nos aseguran que tampoco es cierta la versión de que Priego esté solicitando credenciales de elector a sus subordinados. Servidos.
