Fernando Padilla Farfán / LA HUELLA DEL PAPA FRANCISCO

Por: Ing. Fernando Padilla Farfán

El fallecimiento del Papa Francisco marca el fin de un pontificado que transformó la Iglesia Católica y dejó una huella profunda en la política global y en Latinoamérica.

Aportaciones al mundo católico

Desde su elección en 2013, el Papa Francisco promovió una Iglesia más cercana a los marginados y enfocada en la misericordia. Canonizó a 942 santos, más que cualquier otro Papa en la historia, y publicó documentos clave como la encíclica Laudato Si, que abordó el cambio climático desde una perspectiva moral. Su liderazgo también impulsó reformas administrativas dentro del Vaticano y enfrentó con firmeza los casos de abuso y corrupción en la Iglesia.

Presencia en el ámbito político

Francisco no solo fue un líder religioso, sino también una figura influyente en la política internacional. Su postura sobre la migración, la pobreza y el medio ambiente resonó en foros globales. Criticó duramente las políticas de cierre de fronteras y la criminalización de los migrantes, recordando que “no son números ni amenazas, sino rostros humanos con historias que merecen dignidad”. Además, su encíclica Fratelli Tutti promovió la fraternidad y la cooperación entre naciones.

Impacto en Latinoamérica

Como el primer Papa latinoamericano, su liderazgo tuvo un significado especial para la región. Su visita a México en 2016 fue emblemática, donde condenó la violencia del narcotráfico y la corrupción con un mensaje contundente: “No se puede dialogar con el diablo”. Su enfoque en la justicia social y la inclusión de los más desfavorecidos fortaleció el papel de la Iglesia en América Latina.

Intermediación en conflictos globales

Francisco desempeñó un papel clave en la mediación de conflictos internacionales. Su intervención fue crucial en el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos en 2014. También promovió el diálogo en crisis como la guerra en Siria y el conflicto en Ucrania, instando a la paz y la reconciliación entre las naciones.

El legado del Papa Francisco trasciende su pontificado. Su visión de una Iglesia comprometida con los problemas del mundo y su liderazgo en temas sociales y políticos lo convierten en una de las figuras más influyentes de la historia reciente.