La justicia federal declaró como prófugo de la justicia a Alejandro Irarragorri Gutiérrez, dueño de Santos Laguna y Atlas, por una presunta defraudación fiscal de más de 17 millones de pesos. Ahora, la Fiscalía General de la República (FGR) busca detener al empresario.
El directivo santista originalmente compareció el 20 de marzo por videoconferencia, pero en esa audiencia el Juez de Control decidió que la diligencia se realizaría en forma presencial y citó al empresario para el día 24.
«Se hace constar que a la audiencia señalada para las 10:00 horas, no compareció el imputado… a pesar de que fue debidamente citado. Es importante señalar que el investigado presentó un escrito con el que pretendió justificar su inasistencia; sin embargo, los motivos expuestos no se consideraron razones válidas para desatender el mandato judicial de presentarse oportunamente a la audiencia inicial», dice el acuerdo suscrito por Marín.