A pesar de que la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, reconoció los triunfos y derrotas de su partido y aliados, hay morenistas que le apuestan a la violencia con tal de quedar bien con la que manda en el estado.
Los ejemplos más claros son Mecatlán, en la zona norte del estado donde incendiaron las oficinas del OPLE y Tlalnehuayocan, municipio en el que quemaron paquetes electorales.
En ese sentido, hay voces al interior de Morena que señalan que las mentes “brillantes” son el dirigente estatal Esteban Ramírez Zepeta y el aún presidente del IVAI, David Jiménez Rojas, quienes están buscando a toda costa salvar su pellejo.
De hecho, el funcionario de la transparencia votó en Boca del Río a donde fue enviado según sus cercanos por Palacio de Gobierno para operar a favor de la candidata Bertha Ahued y es uno de los “mapaches” que quieren robarse el triunfo de la panista Marijose Gamboa.
Las versiones eran que en algún momento también pensaron en quemar el OPLE boqueño y el de Alvarado por los compromisos que hicieron con el neo morenista Polo Deschamps.