Como si el horno estuviera para calentar bollos, el titular del poder ejecutivo, Miguel Angel Yunes Linares, faltando a su promesa de campaña de que no habría ni un despido de la estructura del Gobierno Estatal, ha solicitado a la Secretaria de Desarrollo Social cesar, destituir, en suma correr y despedir a más de 200 personas que venían desde hace años laborando en diferentes áreas de esa dependencia.
Con ello, Yunes Linares vuelve a faltar a la verdad y le importa un bledo las promesas de campaña que lo llevaron con el raquítico 32% de la votación a la gubernatura de Veracruz.
Mucha molestia hay entre los despedidos, por el uso indebido de la arbitrariedad y por la falta de palabra del gobernante en turno, a quien sin duda le pasarán la factura en las próximas elecciones donde él sueña la alcaldía porteña este 2017 para su retoño Fernando y la gubernatura, en el 2018, para su monstruito llamado Miguel Ángel, quien por cierto hace y deshace a su antojo dentro de la estructura del gobierno del estado, poniendo y quitando a diestra y siniestra a quien él considera un beneficio o un lastre para conseguir su sueño guajiro, la silla principal de palacio de gobierno.
Algo debe recordar Miguel Ángel Yunes Linares y su estirpe y es que en esto el que preña se olvida, pero la preñada ¡jamás!
