La gente espera de los políticos inteligencia, preparación, creatividad, organización, altitud de miras y proyectos definidos con tiempos y metas a dónde quiere llegar el político y a donde quiere llevar a su pueblo. No es el caso de Donald Trump, puesto que la voz de las mujeres de todo el mundo se dejó escuchar para expresar su repudio en contra de Donald Trump, quien recibió importantes reclamos de actrices y estrellas internacionales, que se sumaron a las multitudinarias protestas pacíficas, que se realizaron al día siguiente de la toma de posesion del presidente norteamericano número cuarenta y cinco; protestas que se contabilizaron en seiscientas setenta ciudades de Estados Unidos, además de las movilizaciones que tuvieron lugar en Roma, Londres, Madrid, Berlín, París, Tokio, Ciudad de México y de muchos países más, correspondiendo a las mujeres de Norteamérica la supremacía con un referente de aproximadamente un millón seiscientas mil protestantes en contra de Trump y sus políticas anti feministas.
Queda claro que Donald Trump será genio y figura hasta el final de su mandato, ya que al enterarse de las protestas de las mujeres norteamericanas, se concretó a expresar que si estaban en su contra, porque no votaron así, en su contra el fatídico ocho de noviembre pasado; que no se explicaba ni justificaba las voces de protesta, lo que significa no reconocer los errores y equivocaciones que a un político le marca el pueblo que aspira a gobernar. Artistas mexicanos como Vicente Fernández, los Tigres del Norte, Gael García, Diego Luna, Salma Hayek, Thalía, Ana de la Reguera, Eugenio Derbez, Jacki Bracamontes, Alejandro González Iñárritu, el Chivo Lubezki y otros más coincidieron en señalar que Donald Trump no es más que un multimillonario caprichoso y necio, por hoy metido a la política, que dejará un gran daño y una mayor división en todos los sectores de la población, pues su cortedad de miras, lo presenta falto de inteligencia y negado para las relaciones públicas, por su trato despótico, prepotente y amenazante.
En los Estados Unidos se escuchó la voz de América Ferrera, (Ugly Betty), para reclamar respeto a su dignidad, a sus derechos humanos, sin importar que fuera fea y después bella; Madonna por ejemplo, tomó el micrófono para expresar miedo a la oscuridad que llega con Trump; pero al mismo tiempo Madonna expresó tener un gran valor para manifestar su enojo, “su furia”, y aprovechó para decir en voz alta lo que su pensamiento le expresaba como el deseo de hacer estallar la Casa Blanca; aclaró Madonna estar consciente de que eso aunque se hiciera, no cambiaría nada y finalmente llamó a no caer en depresión, despidiéndose del público con un “”jodanse””, clásico a su manera. Entre los asistentes, llamaron poderosamente la atención Debora Messing, AysiaReiner, Amy Shumer, Julianne Moore, Katy Perry, Ashley Judd, Emma Watson, Helen Mirren, Cinthia Nixon, Whoopi Woldberg, Chelsea Handler, Charlize Theron, Kerry Washington, Natalie Portman, Miley Cirrus, Demi Lovato, The Edge, U2, Bono, Alicia Keys y Scarlett Johansson; con tantos pleitos Donald Trump, lo único que va ganando cada día que transcurre de su gobierno, es acumular enemistades por todas partes, que poco le ayudarán en la difícil tarea de guiar al país más poderoso del mundo y en esta aventura política, a puerto seguro y el grupo de consejeros, con todo y gabinete en pleno, le ayudarán a naufragar en el mar proceloso de la política.
La resistencia femenina, representada en esta ocasión por mujeres que portaban sombreros de color rosa, continuará, porque ni una sola de las manifestantes aceptará, que cancele derechos adquiridos, porque ninguna mujer permitirá “ser silenciada” y todas ofrecieron como “casa de resistencia”, dispuestas a formar cadenas humanas preparadas para defender los derechos de las mujeres madres, los derechos de las mujeres hijas de hoy y los derechos de las mujeres madres del futuro; para que de una vez por todas quede claro que ningún gobernante podrá atentar en contra de ninguna mujer. No se da cuenta el Presidente norteamericano, que los ataques a Melania Trump, significan una agresión a una mujer, que siempre ha merecido el respeto de todos; pero que ahora con el cargo de Primera Dama, además de mujer y como esposa del Presidente, tiene que permanecer fuera de todo conflicto emocional contaminado por la política y fuera de todo ataque de xenofobia o de venganza hacia ella, por la ineficacia de su esposo para desempeñar su nuevo encargo.
Lo que no hay que perder de vista, es que el poderío económico de Donald Trump, estará presente en todas sus actividades y en mayor medida en que sus colaboradores y hombres de confianza, también resulten ser un selecto grupo de millonarios a quienes una más el interés de sus negocios que el interés político, expansionista, guerrero, invasor y prepotente de los Estados Unidos de Norteamérica. Sobre todo aquellos que tienen inversiones y capitales en la industria de la guerra, puesto que en cualquier lugar del mundo donde exista conflicto, se encontrará armamento y municiones (Made USA). Y donde no exista conflicto, lo crearán con mercenarios siempre eficaces para contaminar la paz de los pueblos, exaltar las pasiones y equipar a ambos mandos si fuera necesario; o simplemente, como en la acción denominada por ellos mismos “rápido y furioso”, que sirvió de pretexto a la industria del armamento, para introducir a México armas prohibidas por la ley y de uso exclusivo del ejército, con la justificación de que ese armamento vendría con dispositivos “chips” para ubicarlos una vez que cruzaran la frontera de nuestro país y así lograr la detención de los supuestos destinatarios, que según los norteamericanos serían los miembros integrantes de los diversos carteles de la droga que se mueven en territorio nacional.
Los patrocinadores de campañas políticas, siempre esperan recuperar sus inversiones en los proyectos y personalidades que apoyan, y sin duda, la Asociación Nacional del Rifle, desde que decidió financiar al republicano al inicio de la campaña Donald Trump, seguro lo hizo bajo el conocido lema de los norteamericanos “Business are business” y de ahí la explicación de introducir a México el tema de la adquisición, posesión y portación de las armas de fuego en nuestro país, para favorecer aún más a la industria de la guerra, de las armas y municiones de los Estados Unidos de Norteamérica; hay que señalar que el senador del PAN y fallido candidato a gobernador de Colima Jorge Luis Preciado, para conseguir espacios en la televisión nacional y entrevistas de prensa, también contó con el apoyo de la Asociación Nacional del Rifle; y que inclusive ejecutivos de dicha agrupación, financiaron esa “campañita”, que no prosperó porque se impuso la voz del General de División Salvador Cienfuegos, Secretario de la Defensa Nacional, quien con un golpe sobre la mesa, tiró el mal habido proyecto de ley que pretendió modificar la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos vigente y el artículo 10 Constitucional, dejando con un palmo de narices al senador preciado, al PAN y a los negociantes de la paz pública de México, que por esta ocasión no tuvieron éxito en su incitación a la violencia, que podría incrementarse si los mexicanos llegaran a portar armas de fuego para su seguridad y legítima defensa en sus automóviles circulando a todas partes y en sus negocios, ya que a cómo están las cosas y hay que recordar las protestas por el “gasolinazo”, como se expresó el “coraje social”, imaginemos cualquier roce con el menor pretexto callejero para sacar y disparar armas de fuego sin medir consecuencias.
La naturaleza humana, según el refrán popular, hace que los hombres se inclinen en pos del dinero o del poder; aunque más bien la inclinación generalizada del hombre político es por el poder, porque vale tanto o más que el dinero; no es el caso de Donald Trump, a quien le han contabilizado las revistas especializadas en escribir de los ricos, una fortuna personal entre ocho y diez mil millones de dólares; con empresas rentables que hacen que los capitales crezcan y las utilidades se multipliquen. A Donald Trump le interesa el poder, porque por el sueldo que ganará como Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, equivalente a cuatrocientos mil dólares al año, no se cree que hubiera decidido sacrificarse por sus connacionales y mucho menos cargar tantas responsabilidades públicas; y al final enfrentar el rechazo de los grupos sociales de todo el mundo, como el de las mujeres inicialmente relatado. Obama se retira con cincuenta y cinco años de edad a vivir de su pensión equivalente a doscientos siete mil ochocientos dólares anuales; según lo establecido por el sistema de pensiones desde mil novecientos cincuenta y ocho y que mantiene a George H. W. Bush; Jimmi Cárter; George W. Bush Jr.; Bill Clinton y ahora el demócrata Obama. Un símil del sistema de pensiones para los ex presidentes de México y sus viudas; todos ellos “finísimas” y reconocidas personas.