México reclama hoy un sacrificio de todos: Narro

En México la vida nunca ha sido simple. Siempre se han enfrentado retos y adversidades. Siempre se ha estado en la encrucijada y lo que debemos hacer, “de una vez y para siempre, es confiar en nosotros y en lo nuestro, trabajar con intensidad, en la misma dirección y todos unidos”, aseveró el titular de la Secretaría de Salud (SSa), José Narro Robles.

Lo que hoy México requiere, demandó, es estar a la altura de las exigencias y tener la capacidad de responder al desafío, al tiempo de que estableció que la construcción de una nación es siempre dolorosa y nunca acaba, “pero la grandeza de nuestro país está fuera de discusión”.

Al hacer uso de la palabra en el marco del IV Informe de Gobierno del gobernador de Chiapas, Manuel Velasco Coello, con la representación presidencial, Narro Robles resaltó que hoy México reclama un sacrificio: “la patria requiere de todos sus hijos. No nos equivoquemos, la respuesta es obvia y está en nosotros”, por lo que de una vez y para siempre confiar en nosotros y trabajar con intensidad, en la misma dirección y todos unidos.

Recordó que cuando se hace frente a los problemas se ha respondido con unidad, el país ha salido adelante y pronto, en contraparte, cuando han prevalecido las divisiones y enfrentamientos, todos hemos perdido y la recuperación ha sido lenta y lastimosa.

“Cuando esto nos ha pasado, incluso hemos perdido territorio, recursos y orgullo. Hoy México nos reclama un sacrificio, hoy la patria requiere de todos sus hijos. No nos equivoquemos, la respuesta es obvia y está en nosotros. En los tiempos difíciles se expresa la grandeza de los pueblos”, aseveró Narro Robles.

México, dijo, vive uno de esos momentos que permite separar a los timoratos de los determinados; a los dispuestos y a los expuestos; a los que titubean y a quienes actúan con certidumbre y prontitud. Uno de esos tiempos que divide lo que la historia registrará como deseable y lo que nuestros nietos y sus hijos preferirán olvidar y pasar por alto. Estamos en uno de esos momentos definitorios del porvenir, que servirá de ejemplo a los mexicanos del futuro.

Tengamos presente que nadie vendrá del exterior para hacer lo que nos toca, que nadie se detendrá a considerar nuestras debilidades y necesidades, al contrario, muchos querrán tomar ventaja de nuestro contratiempo y si cometemos el error de dividirnos, la suerte estará casi sellada.