El viacrucis de Jennifer Antonio Carillo no acaba: el lunes por la madrugada su esposo, en estado de ebriedad, le roció gasolina y le prendió fuego, provocándole quemaduras de segundo grado en todo su cuerpo; primero fue atendida en el IMSS de Matías Romero, Oaxaca, después fue trasladada al Hospital Gómez Farías de Coatzacoalcos, y este miércoles llegó al Hospital Regional de Veracruz para ser atendida, aunque el pronóstico no es bueno.
El director del nosocomio, José Luis Cerecedo, informó que a petición de la Secretaría de Salud de Oaxaca recibieron a Jennifer, quien llegó esta mañana, y está “sumamente grave por el tipo de quemaduras que trae”.
Señaló que por el momento será atendida en el Hospital de Veracruz porque tienen la suficiente capacidad para hacerlo y ha recibido la atención y los antibióticos necesarios, así como la limpieza que se requiere.
El pronóstico no es bueno, porque aunque es joven, tiene apenas 18 años de edad, tiene el 70 por ciento del cuerpo quemado.
De acuerdo con el reporte del Patronato de Bomberos de Matías Romero, después de quemar a la mujer, su esposo, Edgardo Romero Álvarez huyó a bordo de una camioneta de cabina blanca sin batea, llevándose a su hijo de 3 años de edad con dirección a Veracruz, donde supuestamente tiene familiares.
Por su parte, los elementos de la comandancia de Sector de la Policía Estatal de Palomares, Oaxaca, realizaron sin éxito un operativo con la finalidad de dar con el paradero de la persona reportada y recuperación del menor.
(Con información de la XEU)
