“La película me hizo llorar en dos ocasiones, es muy bonito el trabajo que hicieron con la historia de los niños”, dijo conmovida una espectadora al productor y editor Carlo Corea, al finalizar la proyección de Día de visita, un filme que cautivó a la audiencia gracias a su mensaje esperanzador en torno a las maravillosas historias de niños que dejan las calles para empezar a tener una nueva vida gracias a una asociación en Puebla.
“La directora fue como voluntaria cuando tenía 16 años, se prometió volver para hacerles una película. Es una forma muy extraña de acercarse a la realidad; en este caso, el cine te acerca a esa realidad, a esas historias que no conocemos o vemos tan fácilmente pero eso es una virtud del cine que te limpia la mirada para ver todo esto”, explicó Carlo Corea sobre el origen del filme. Agradeció a la cineasta Nicole Opper su apoyo para la realización de este filme.
La cinta narra los testimonios de los niños que viven apoyados por la asociación Ipoderac, que les brinda hogar, alimento y educación, gracias a las ganancias que genera su venta de queso de cabra. Día de Visita es un documental que sigue los pasos de Juan Carlos, quien escapó de una casa donde sufría de abuso y vivió en las calles de México por años antes de encontrarse con este lugar. Muestra lo que ocurre con él, es su época más transformativa, mientras encuentra la fuerza para regresar a la Ciudad de México y reunirse con su padre.
“La película tiene dos retos enormes: Primero, es la confianza porque como país es uno de nuestros grandes males, no confiamos mucho en los de al lado y eso se dio luego de vivir con ellos. No tenía un planteamiento muy escrito, las historias que se eligieron se dieron en el desarrollo. El segundo reto fue la institución que estuviera abierta y hacer un esfuerzo para mostrarse, es un ejercicio de transparencia, fue la apertura”, dijo el productor.





