Sin fundamento, señalamientos de Solalinde contra sacerdotes por tema de desaparecidos: Diócesis de Orizaba

El vocero de la Diócesis de Orizaba Helkyn Enríquez Báez solicitó al sacerdote Alejandro Solalinde Guerra no generalizar sus acusaciones de omisión eclesiástica en el tema de los desaparecidos, y aseguró que varios sacerdotes de esta zona estuvieron amenazados por conocer este tipo de casos.
Mientras que por su parte el presbítero Julián Andrés Verónica Fernández, encargado de la Pastoral en la Diócesis de Córdoba, señaló que “decir que obispos y sacerdotes no han hecho nada para ayudar a las familias de los desaparecidos es ignorar el trabajo realizado desde tiempo atrás, tal vez el padre Solalinde no ha leído los periódicos o ignora el trabajo”.
Estas son las opiniones luego de las acusaciones que reviviera el padre Alejandro Solalinde al acusar que sacerdotes y obispos sabían de fosas en Veracruz y no hicieran nada para ayudar a las familias de los desaparecidos, entre ellos, monseñor Eduardo Patiño Lea obispo de Córdoba.
En este sentido el padre Julián Verónica dijo: “en su momento el obispo de Córdoba lo desmintió públicamente y lo volverá hacer”.
El vocero de la Diócesis, Helkyn Enríquez Báez, expuso: “el generalizar siempre implica un juicio equivocado, no se puede realizar una afirmación categórica a partir de una generalización. Las suposiciones no se pueden convertir en afirmaciones, sobre todo si no se tiene conocimiento panorámico de una provincia tan grande como es la del estado de Veracruz, que abarca ocho diócesis, la de Tuxpan, Xalapa, Papantla, Veracruz puerto, Córdoba, Orizaba, San Andrés y Coatzacoalcos. Estamos hablando de realidades muy diferentes. Tan sólo la de Orizaba se compone de tres escenarios diferentes: la sierra de Zongolica, la zona urbana y la campesina. Lo mismo sucede con las otras diócesis. Una afirmación en ese sentido, se respeta como suposición, pero Solalinde no puede decir que conozca la realidad y por lo tanto no puede englobar en una declaración, así que incluso es un modo injusto y con un desconocimiento de la realidad”.
Indicó que en su momento sacerdotes de esta Diócesis recibieron amenazas, presuntamente a manos de la delincuencia organizada, “en ocasiones los pastores de la comunidad tenemos conocimiento de los hechos porque así nos lo hacen saber los mismos feligreses, pero mucho de eso va en el trabajo interno. Nosotros no podemos estar haciéndolo público, porque tiene que ver incluso con el secreto de confesión”.
El presbítero Verónica Fernández, quien se ha destacado por su labor activista, lamentó el problema que hoy se vive en Veracruz, al contar con un fosario sin fin, pero dejó en claro que no debe pasarse por alto que es consecuencia de la corrupción e impunidad que privó en administraciones pasadas.
Aquí el fiscal Jorge Winckler Ortiz tiene que dar respuesta a los familiares de los desaparecidos, porque eso es lo que buscan desde hace mucho tiempo y al no tenerla piden su destitución.
Indicó que desde hace tiempo en la Diócesis de Córdoba se ha acompañado a las brigadas y colectivos en la aplicación de pruebas de ADN, porque está de por medio la vida de muchos desaparecidos, eso es lo importante, encontrar respuestas y no dividir.
“Por supuesto que jamás serán buenas las acusaciones sin fundamento, no es bueno hablar con mentiras”, finalizó.