La pérdida de elaboración de textiles en el municipio de Acatlán es alarmante, ya que actualmente esta tradición está al borde de la desaparición, alertó Miguel Ángel Sosme, coordinador del Festival Anual de Textiles.
“En este lugar solamente sobreviven tres mujeres mayores de 75 años, tuvimos la oportunidad de estudiar este caso a fondo y me parece que es un caso representativo de lo que ocurre en muchos puntos del estado”.
Acatlán es reconocido por la elaboración de cobijas en telar de pedal con lana y estambre.
Este fenómeno también es preocupante en la zona norte de la entidad, donde se reducen los espacios donde se teje en telar de cintura con fibras naturales a diferencia de la sierra de Zongolica donde todavía se preserva, pero al mismo tiempo se pierde.
Al igual que en el caso de las lenguas indígenas, la discriminación dentro de las ciudades hace que las personas dejen de usar los diferentes tipos de indumentarias indígenas, expuso.
“La discriminación es un punto importante, la gente cuando va a las ciudades se enfrenta al racismo, a la exclusión, al señalamiento público por la forma en la que visten porque se asocia con el atraso y con la pobreza”.
Además influye la economía y practicidad, pues la confección de textiles mediante el uso del telar o a mano es tardada y cara.
“Con el uso de la ropa de fábrica la gente ya no tiene la necesidad de hacer textiles tradicionales, también los tiempos de trabajo y el proceso de confección de hacer una pieza como estas que lleva meses y hasta un año. La gente piensa que es más barato gastar 100 pesos y comprar dos playeras a invertir un año en estar tejiendo en el telar”.
Jóvenes, rescate e innovación
En contraste, las nuevas generaciones se han interesado durante los últimos años en aprender la elaboración de textiles a través de diferentes técnicas, lo que ha frenado la desaparición de esta tradición milenaria que ha dado identidad a las diferentes culturas en nuestro país y estado.
“Los jóvenes le están apostando mucho a hacer rentable esta actividad, por ejemplo, a través de concursos regionales, a través de la venta, la innovación. Lo que hacen los jóvenes es un trabajo de innovación que se adapta a la realidad juvenil, al nuevo mercado. Son piezas que conservan elementos de la tradición, pero son textiles que podría usar cualquier persona”.
Veracruz y sus múltiples textiles
La cultura nahua tiene presencia en 12 municipios veracruzanos en los que los textiles conservan el color de las culturas originarias.
En Atlahuilco se tejen cobijas, tapetes, jorongos, manteles, rebozos, cotorinas, fajas y en Chicontepec blusas y faldas. Son los tipos de bordado los que dan identidad a las diferentes regiones, como en Ilamatlán, donde se adornan con chaquira a diferencia de Soledad Atzonmpan donde se tiñen con colores naturales.
La multiculturalidad de la entidad se refleja en sus textiles elaborados por huastecos, nahuas y totonacos, entre los que destaca el quechquémitl, prenda que usan las mujeres sobre las blusas y que adorna según la región, su torso con diferentes materiales y estilos.
El festival
Con el fin de preservar y difundir el uso de los textiles, Xalapa será sede por primera vez del Festival Anual de Textiles que tendrá lugar del 30 de marzo al 2 de abril, evento organizado por jóvenes que incluye talleres, exposiciones y charlas con exponentes provenientes de Perú y de diferentes zonas del país. La información del evento puede consultarse en la página de Facebook: Festival Anual de Textiles.