El exgobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, debió haber sido deportado de inmediato al momento de su detención en Guatemala y no pasar por el proceso de extradición, debido a que se encontraba en el país con documentos falsos.
Así lo indicó el abogado penalista Everardo Moreno Cruz, académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en entrevista con La Silla Rota.
El litigante explicó que el juicio de extradición se inicia cuando las autoridades de cierto país, solicitan a otro la extradición de una persona; sin embargo, el solo hecho de contar con un pasaporte falso, ya se acreditaba a Javier Duarte su deportación a México.
“Indudablemente que el señor (Javier Duarte) debería ser deportado y no estar dando la vuelta en decir que se va a solicitar la extradición. En este proceso, se le detiene a una persona cuando un país solicita que sea detenido y se inicia un juicio de extradición, pero en este caso, encontrándose el señor Duarte, sin documentación que acredite su legal estancia en Guatemala, debería ser deportado de inmediato y entregado en la frontera a las autoridades mexicanas, sin referirse al juicio de extradición”, manifestó.
De igual manera, La Silla Rota consultó la Ley de Migración de Guatemala, donde efectivamente, el artículo 112, del capítulo II, que habla de las faltas, indica que serán sancionados con la deportación a su país de origen, los extranjeros que incurran en la falta de entrar o permanecer en el país con documentos falsos.
“Artículo 112. Serán sancionados con la deportación a su país de origen, los extranjeros que incurran en las infracciones siguientes:
a) Ingresar o permanecer en el país evadiendo el control migratorio,
b) Entrar o permanecer en el país haciendo uso de documentos falsos;
c) Reingresar al país sin autorización, luego de haber sido expulsado; y,
d) Haber sido condenado por los tribunales a una pena de prisión mayor de 2 años; luego de cumplida la pena, el juez de la causa lo pondrá a disposición de las autoridades de la Dirección General de Migración”
De acuerdo con autoridades de la Procuraduría General de la República (PGR), el exgobernador de Veracruz ingresó vía terrestre a Guatemala, de manera ilegal en noviembre del 2016, sin pasar por algún control migratorio.
Además, él y su esposa Karime Macías contaban con identificaciones y pasaportes falsos; se hacían llamar Alejandro y Andrea, respectivamente.
“Fue detenido porque estaba de por medio la ficha roja en Interpol, la orden de Interpol fue detenerlo en Guatemala, por lo que desde el momento en que fue detenido y que no pueda acreditar su legal estancia, debería haber sido deportado de inmediato sin necesidad de extradición, ni si quiera gastar los guatemaltecos en gasolina y llevarlo a una cárcel a darle de comer. Simplemente debería habérsele llevado de inmediato a la frontera. A mi juicio debería estar ya en la cárcel mexicana”, agregó el también ex subprocurador de la PGR, Everardo Moreno.
Javier Duarte de Ochoa se encontraba prófugo desde octubre del 2016, un mes antes de que terminara su mandato en Veracruz. Es acusado de lavado de dinero y delincuencia organizada, por la PGR.
