Para el senador de la República por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Manuel Bartlett Díaz, quien ganó la gubernatura en Veracruz fue el presidente Enrique Peña Nieto, al pacta el triunfo con el Partido Acción Nacional (PAN).
“Ganó Peña Nieto, pues claro, ganó Felipe Calderón, ganó Carlos Salinas, es lo mismo (…) es una patraña, no podía ganar el PRI porque no podían, ahí está el desastre de ese tamaño, entonces Peña Nieto acuerda con sus amigos del PAN que gane el supuesto PAN”, expresó en entrevista con el periodista Ramsés Yunes, en Uninoticias 88.9 FM.
Afirmó que si los priistas “tuvieran vergüenza” ya no estuvieran en ese partido, porque el titular del Ejecutivo federal lo que ha hecho es venderle el petróleo mexicano a los Estados Unidos.
Al preguntarle cómo ve el desarrollo del proceso en los otros estados donde habrá elecciones este año, en particular en el Estado de México, afirmó que Andrés Manuel López Obrador y Morena han ido ganando terreno rápidamente y presumió que en el país no hay otro líder de izquierda más que el tabasqueño.
Sobre su libro “El fraude de la Reforma Educativa, una reflexión crítica”, que este sábado presentará en la Feria Internacional del Libro Universitario (FILU) de la Universidad Veracruzana (UV), manifestó que el cambio al modelo educativo proviene de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) que busca la privatización económica y social, y también del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional (FMI).
“Este proyecto lo hicieron ellos, es un proyecto privatizador, contrario a la historia de este país y a lo que necesita México en materia educativa”, expresó el senador morenista al decir que el Presidente no ha podido aplicar esta, “farsa, esta reforma policiaca militar con la que no lograron hacer nada”.
Desde su punto de vista, lo que hizo Peña Nieto al tomar el poder, fue sumar a su llamado “Pacto por México”, todas las reformas “reaccionarias” propuestas por organismos internacionales, profundizando lo realizado por Salinas y sus sucesores en la Presidencia de la República, en el movimiento neoliberal.
“Lo que hizo fue tomar esa ofensiva de la OCDE para atacar la visión de una educación nacionalista y conforme a los intereses de México y no de las empresas trasnacionales, es una reforma laboral agresiva y amenazante que hace un grave daño al futuro de México”, reiteró.
Igualmente recordó que abandonó las filas del PRI porque nunca se imaginó a dicho instituto político privatizando el petróleo y la electricidad y entregando las telecomunicaciones a intereses extranjeros.
“Eso ya no es del PRI, es un aparato que beneficia a intereses extranjeros contrarios a los mexicanos”, puntualizó.





