A tan sólo 12 días de la elección para renovar los 212 ayuntamientos veracruzanos, decenas de alcaldes cuyas administraciones ya son auténticos cochineros, pretenden ser los fieles de la balanza y uno de ellos es el Presidente Municipal de Acayucan, Marco Antonio Martínez Amador, quien fue acusado por el ex director del DIF, Amadeo Retureta, candidato del PANAL a la alcaldía acayuqueña, de entrometerse y obligar a renunciar a cuatro integrantes de su planilla.
Dicen cercanos a Amadeo Retureta que Martínez Amador en franca desesperación porque aún no completa los 20 mil votos que le prometió al Gobernador Miguel Ángel Yunes Linares para el abanderado de la coalición “El Cambio Sigue” a cambio de impunidad –es decir como condición para no ir a parar a la cárcel como a los ex colaboradores de Javier Duarte– se ha dedicado a amenazar a todos los actores políticos de otros partidos para que renuncien, como ocurrió ahora con el Panal. Entre las que tiraron la toalla a Nueva Alianza está Celia Juárez Lorenzo, que iba como regidora segunda propietaria y su suplente, Milagros Nataly Montoya González, Elisa Farfán Reyes que iba como síndico suplente y Liliana López Mijangos, como regidora propietaria en la posición número ocho.
En el caso de Celia Juárez, ella renunció, tras la advertencia del personal del Ayuntamiento en el sentido que si continuaba en la planilla de Amadeo Retureta, no se le autorizaría el permiso a su agrupación de coheteros y de igual forma el resto de los que hoy dimitieron, fueron presionados por Marcos Martínez, recordándoles que todos tienen su “expediente”.
En un noticiario regional Retureta Cano afirmó que “hace días ellos me manifestaron su temor y su angustia de la presión, de la coacción o persuasión de renunciar a los puestos que habían sido postulados, ya que han sido víctimas de intimidaciones, amenazas directas para afectar su economía, su integridad física o de los miembros de sus familias”.
Agregó que esta situación de ninguna forma lo intimida porque como ciudadanos libres de Acayucan “que estamos cansados, hartos y molestos de la política, que se ha venido manejando en nuestro municipio es por eso que iniciamos esta cruzada por defender la dignidad de los acayuqueños, basta de intimidaciones, basta de manejar una política nociva y lacerante, precisamente por esto, es que los ciudadanos hemos perdido la fe y la confianza en nuestros representantes populares”, fustigó. Públicamente el abanderado del PANAL exigió a Marcos Martínez, que no lo citó por su nombre, que retire sus sucias manos del proceso electoral y advirtió estar al corriente de los excesos administrativos que él ha llevado a cabo “ y que se concentre en detallar las finanzas del municipio porque al término de su administración deberá de rendirnos cuentas a todos los acayuqueños, y me pregunto ¿ Por qué si no representamos una amenaza fuerte según ellos en esta contienda electoral, por qué nos atacan de esta manera?”.
En Acayucan por cierto, se habla que el quebranto patrimonial rebasa los 60 millones de pesos, así como pasivos que rebasan los 80 millones de pesos, situación que hasta el 30 de noviembre pasado a Marcos Martínez no le preocupaba por que contaba con la protección del “honestísimo” diputado federal Erick Lagos Hernández.