Quien lo dijera. Hace 17 años hubiera sido impensable que el “paladín de la democracia”, aquel candidato que prometía acabar con las “tepocatas” y “víboras prietas”, Vicente Fox, apostara por la victoria del PRI en unas elecciones.
Los tiempos han cambiado. El ex presidente hoy alerta sobre la posibilidad de que triunfe una demagogia “muy similar y muy parecida a aquella que ha destruido naciones, que ha destruido economías, que ha destruido vidas, que ha destruido bienestar” en los comicios del Estado de México.
En plan de campaña y contracampaña, Fox arremetió contra Andrés Manuel López Obrador, a quien llamó “falso profeta” y “el clásico dictador en potencia”, que busca armar en el Estado de México su plataforma para los comicios presidenciales de 2018.
Y se inclinó por el candidato del PRI, Alfredo del Mazo. “Yo veo que finalmente prevalecerá la razón. Yo creo, y no es que me dé mucho gusto, pero creo que ganará Del Mazo porque ha sido probablemente el más sereno, también el más acusado, pero el más sereno, prudente, el que más ha planteado soluciones reales a problemas reales. En ese sentido, ese arroz ya se coció y no es que me dé gusto, pero de los males hay que buscar el de menor impacto”.
¿Qué diría el Fox del 2000 –y quienes creyeron en él- del Fox de 2017?
