Arrastre de piedras en norte de Orizaba, un riesgo para transeúntes: vecinos

El arrastre de material arenogravoso así como de piedras, producido por las intensas lluvias registradas el pasado fin de semana en la zona de las faldas del Pico de Orizaba, convirtió la zona limítrofe de Ixhuatlancillo y Orizaba en una zona de riesgo.

De acuerdo con la señora Claudia Villegas Marín, quien es vecina de la zona de la prolongación de Norte 2 y crucero de Santa Ana, en la franja pasan muchos estudiantes, amas de casa y adultos mayores que llevan riesgo de ser lastimados por las piedras arrastradas por la lluvias y que al paso de los vehículos son lanzadas hacia las banquetas golpeando los comercios y viviendas.

“Solicitamos a los ayuntamientos de Orizaba y de Ixhuatlancillo que hagan algo para pavimentar las calles de donde bajan tantas piedras pero no hacen caso y ésta es una zona de mucho paso de vehículos y camiones grandes quienes avientan al paso de la calle las piedras, pero no nos hacen caso y cada año se repite esta situación”.

Como ejemplo dijo que por la tarde del domingo, las lluvias registradas en la zona norte arrastraron nuevamente piedras hasta la prolongación de Norte 2; una de estas fue lanzada hacia su tienda con tal fuerza que sumió la lámina de un refrigerador que se encontraba al interior.

“No quiero imaginar que esa piedra le hubiera pegado a un niño o una persona. Como vecinos no nos hacen caso y la pasamos limpiando la calle de piedras, pero mientras llueve no se puede salir y hacer faena y estamos con el riesgo” finalizó.