Poderoso subsecretario de la Sedecop (ex alcalde para mayores señas) estrena camioneta de lujo, Mercedez Benz y de paso el funcionario también se consintió con un Rolex. Dicen que luego de que le negaron regresar a su cargo edilicio, que entra en una profunda depresión. Pero el muy divo, que se va de «shopping» para combatir la «depre». Suerte que tienen los ricos porque a los pobres no les alcanza ni para pagar el psicólogo.
¿Y dónde está la austeridad que tanto pregonan los del «gobierno del cambio»? Una pista: fue presidente municipal de una gélida zona. Calientes… calientes… ¡ya se quemaron!





