Después que decapitaron a una alumna en Mintatilan y secuestraron a otra en Xalapa, la Universidad Veracruzana (UV) emitió un comunicado en condena «violencia extrema» en las ciudades de Minatitlán y Xalapa, por lo que exige un freno a la “escalada de violencia” que se vive en Veracruz.
“Con dolor e indignación recibimos la noticia de agravios en contra de universitarios, víctimas de la violencia extrema en las ciudades de Minatitlán y Xalapa. Manifestamos con la mayor energía nuestro repudio absoluto por este tipo de agresiones”, señala el boletín.
Esta tarde, sujetos armados levantaron a una joven de 17 años de edad, en Jilotepec, provocando la movilización de diversos cuerpos policiacos, quienes implementaron un operativo sin lograr el rescate de la menor, hasta el momento.
El hecho se registró alrededor de las 14:30 horas de este lunes, cuando sujetos armados a bordo de un automóvil Volskwagen tipo Jetta, color gris, sin placas, interceptaron a María Fernanda Barrera Cuevas de 17 años de edad, en en el camino estatal Xalapa – La Concepción, municipio de Jilotepec.
Los agresores subieron por la fuerza a la menor, para luego darse a la fuga con rumbo desconocido, por lo que testigos solicitaron auxilio al número de emergencias 911, donde se canalizó el apoyo a elementos de la Gendarmería Nacional, Policía Estatal y Fuerza Civil.
Los uniformados implementaron un operativo, logrando ubicar abandonado el auto, en la congregación El Pueblito, municipio de Banderilla, donde se dijo que los plagiarios huyeron a bordo de otro vehículo color verde, sin que hasta el momento se haya logrado rescatar a la joven.
Por otra parte, el pasado viernes en la carretera Cosoleacaque-Jáltipan fue encontrada la cabeza de una joven de 24 años de edad que fue privada de su libertad hace una semana, en el municipio de Minatitlán.
Familiares confirmaron que se trata de Lourdes Patricia Herrera Martínez y pidieron a las autoridades localizar los restos.
La chica estudiaba la carrera de Gestión Empresarial en la Universidad Veracruzana (UV). Sus familiares pidieron ayuda al Gobierno del Estado y la Federación luego de su secuestro, pues los captores pidieron un millón de pesos, cuya cantidad no pudo ser reunida para su rescate, pues aclararon que se trató de una equivocación.
“Demandamos justicia y, sobre todo, otra vez nos unimos con los veracruzanos exigiendo un alto a esta escalada de violencia en un contexto de impunidad que tanto lacera a nuestro Estado”, concluye el comunicado de la UV.





