Tremenda rabieta la que hicieron en la asociación ultraderechista denominada “Sí Vida” luego de que, como se lo adelantamos aquí mismo, se presentó en el Congreso del Estado la iniciativa para ampliar las causales y temporalidad en el que se puede practicar un aborto no deseado en Veracruz.
El grupo ultraconservador la emprendió a insultos en contra del gobierno del estado y del PAN, a los que tildó de “traidores de las familias veracruzanas”, a pesar de que la iniciativa de reforma al Código Penal del Estado fue presentada por la diputada del Movimiento de Regeneración Nacional, Tanya Carola Viveros, quien fue secundada por organismos y activistas en defensa de los derechos de las mujeres.
Lo más hilarante es que, ahora sí, en “Sí Vida” se dieron cuenta que en Veracruz se cometen feminicidios y desaparecen personas, hecho que le reprocharon al gobierno estatal, pero que nunca antes les había importado en lo más mínimo. Menos aún, cuando eso sucedía durante el sexenio de Javier Duarte, quien le dio por su lado a estos grupos neofascistas.
Hoy más que nunca, es urgente reafirmar la laicidad del Estado mexicano. Por lo pronto, veremos si pesa más el sentido común, el respeto de los derechos humanos de las mujeres y el acatamiento de ordenamientos federales e incluso internacionales, que la presión de los sectores más retrógrados ligados a la Iglesia Católica.





