Siguen apareciendo “peines” y “asegunes” sobre la concesión del Libramiento de Plan del Río, que este jueves fue ampliada por 30 años más a la empresa Concesiones y Promociones Malibrán, propiedad de la familia Ruiz Anitúa.
Nos enteramos que no sólo se trató de beneficiar a una familia cercana a los afectos del gobernador Miguel Ángel Yunes Linares. La verdadera intención es menos noble y mucho muy política.
Resulta que el beneficio para el gobierno estatal por esta operación va a ser del orden de unos 800 millones de pesos, que le van a caer justo en el momento en el que inicie el proceso por la sucesión en la gubernatura.
Nos dicen que precisamente por eso metieron en la misma sesión del Congreso local el tema de los fideicomisos para la reestructuración de la deuda, para desviar la atención sobre el verdadero interés de Miyuli: obtener dinero fresco y abundante para la campaña que viene.
Y se los pasó de humo. Casi a todos.
