Polémica por matrimonio igualitario y despenalización del aborto, se acabaría con un plebiscito: magistrado

Para el magistrado del Segundo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Séptimo Circuito, José Manuel de Alba de Alba, el fin de la controversia por la aprobación del matrimonio igualitario, la despenalización del aborto y demás temas polémicos, podría darse a través de un plebiscito.

Y es que al participar en la presentación del libro «Mecanismos de Participación Ciudadana: una experiencia global», elaborado por consejeros del Instituto Electoral del Estado de Querétaro (IEEQ), sostuvo que de esta manera, la ciudadanía podría decidir, por mayoría, si acepta o rechaza tales propuestas.

«Si la mayoría dice que no, que no quiere, correcto, pero eso se lleva a ley y hay un partido, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) o todos los que están legitimados, que lo pongan a consideración de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) a través de una acción de inconstitucionalidad y ésta decida», explicó.

En sus palabras, añadió que aunque la mayoría rechace la aprobación del matrimonio igualitario o la despenalización del aborto, no puede conllevar a la violación de los Derechos Humanos, por lo que el máximo Tribunal Constitucional del país, se pronunciaría y resolvería el problema.

«Aunque voten en el estado de Veracruz que no quieren el matrimonio homosexual, la SCJN ya decidió que es inconstitucional no permitirlo», ahondó el jurista.

De Alba de Alba criticó el hecho de que los diputados no quieran asumir su labor de discutir y someter a votación estos temas, alegando muchas veces que están comenzando su encargo o que ya están finalizando su periodo y políticamente no les favorecería.

«No sé qué están esperando, el matrimonio gay ya se debe permitir, es una realidad, el que se quiera casar, con o sin la legislación lo va a hacer, porque se va al registro civil, se lo niegan y se va al juzgado de distrito y lo casan con una suspensión de plano», mencionó.

Finalmente refirió que muchas veces los legisladores quieren aplicar una agenda, que no es la misma de la ciudadanía, «y no les interesa, puede estar pasando y si no está en su agenda, no lo consideran políticamente correcto, si creen que en ese momento le quitan votos, se complica la cosa».