A pesar de haber sido una promesa de campaña por parte del alcalde Reené Huerta, los habitantes de las inmediaciones del río Blanco, en la colonia Santa Rosita dijeron que no han recibido apoyo de las autoridades municipales para solucionar el problema de alto riesgo en que viven, debido a los constantes derrumbes del cerro y las crecidas del afluente.
Los vecinos explicaron que durante la presente administración municipal, no se invirtieron recursos para prevenir en materia de protección civil, ni se gestionaron apoyos federales con la Conagua para el saneamiento del río, construcción de muros gavión ni un nuevo puente que reúna las condiciones de seguridad vehicular y peatonal.
El señor Joaquín Hernández afectado de esta zona, dijo que el alcalde Reené Huerta al inicio de su administración prometió que los habitantes que hicieron su casa en la colonia Santa Rosita, serían tema de análisis de la Secretaría de Protección Civil, y a través de un dictamen determinarían su regulación o reubicación.
“A cuatro años de esa promesa, no ha habido nada; durante estos tres años y medio, el río no recibió limpieza, no hubo obra social ni de infraestructura para la colonia a pesar de que se pagan impuestos”.
Señalaron que el río durante la temporada de lluvias se desborda afectando a las familias que aquí residen, sin embargo no se buscó el dictamen técnico de la Secretaría de Protección Civil para reubicar a más de 110 personas y no permitir nuevos asentamientos, lo cual no ocurrió y a cambio se estableció un grupo de “paracaidistas”
“Cuatro años no bastaron para dictaminar y resolver el problema de riesgo que enfrentan familias de la colonia Santa Rosita ubicadas en las riberas del río Blanco e incluso surgen nuevos asentamientos a las orillas del río”, finalizaron





