Al coincidir en un evento celebrado en el puerto de Veracruz, el gobernador panista Miguel Ángel Yunes Linares y el líder sindical priista Víctor Flores, estuvieron a menos de tres metros de distancia, pero ni así se saludaron.
Ambos personajes guardaron la compostura, llegaron en diferentes momentos a la ceremonia, el mandatario estatal lo hizo acompañado de su equipo de trabajo mientras que el dirigente sindical arribó con su equipo de guardaespaldas, parte del gremil ferrocarrilero y hasta su ahijado el boxeador Tomás «El Gusano» Rojas.
El encuentro sin saludo se dio en la ceremonia de arranque de trabajos de construcción de un conocido café que quedará instalado en el bulevar Manuel Ávila Camacho.
Ángel Fernández, empresario veracruzano y propietario del nuevo establecimiento, dijo que invitó a Víctor Flores porque es uno de los clientes asiduos de la cadena comercial. Al mandatario estatal lo invitó por ser la autoridad del Estado de Veracruz.
El secretario general del Sindicato de Trabajadores Ferrocarrileros de la República Mexicana (STFRM) y cercano a la cúpula del Partido Revolucionario Institucional (PRI) llegó rodeado de hombres robustos y malencarados que no se separaron en ningún momento de su jefe.
«El Rey Midas», como la prensa jarocha bautizó al dirigente sindical, dio una entrevista en la que habló de varios temas, entre ellos la situación de los robos a los trenes en el país y después se sentó en primera fila. Yunes Linares, el gobernador azul, tomó asiento en el templete de los invitados especiales.
La ceremonia se llevó a cabo alrededor del mediodía de este miércoles y transcurrido el evento ni el panista ni el priísta se volteraron a ver.
Sin embargo, a mediados del mes en curso, Yunes Linares y Víctor Flores se encontraron, saludaron y charlaron durante algunos minutos en el aeropuerto Heriberto Jara Corona, donde coincidieron en la inauguración del vuelo Veracruz-Monterrey de la línea aérea Aeroméxico
